Bilbao

Inicio de curso

Son muchos los temas que se acumulan al inicio de curso. Valga esta relación como avance. Llegaron los cambios artísticos al Teatro Real y también los dos primeros títulos, recibidos por la crítica con escepticismo y con dudas en la taquilla.

La Razón
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Mortier se ha prodigado en entrevistas, creando más expectativas de las que le conviene y algunas de sus declaraciones han de ser analizadas: «La opinión de los estudiantes nos dará la pauta para futuros montajes». ¿Acaso los estudiantes representan al público del Real que paga 160 euros por butaca?

Antonio Moral empezará en octubre sus nuevas responsabilidades en un cargo que abarca el Auditorio Nacional, el CDMC y el CNMH y que, sorpresa, no ha sido sacado a concurso por el Inaem. En cambio sí saldrá a concurso la dirección de la Zarzuela. ¿Por qué uno sí y otro no? Más valdría correr un tupido velo sobre la etapa Marset & Molina. Mientras, se despide a Miguel Roa y se contrata a un tercero por nueve meses, hasta el cese de Olmos. ¿Acaso no se podría haber mantenido a Roa hasta entonces? Los juzgados decidirán.

¿Con qué cara podrá ir el Inaem a Oviedo a recoger el premio de la Fundación Campoamor, otorgado por la crítica musical a «Partenope», cuando ha sido el Inaem quien decidió cortar su recorrido por los teatros españoles? Por estos teatros pasa de todo, basta ver el de Valladolid, con dos direcciones generales tras la obligada readmisión de Mercedes Guillamón. En Bilbao tuvo Del Monaco que salir a la palestra para quejarse de que en el Euskalduna no se pudiera ensayar su «Don Carlo» por atender a la Pantoja.

A la ONE le va de cine, pero resulta incomprensible que el concierto centrado en John Williams, el más popular de toda su programación, sólo se haya ofrecido un día. ¿No convendría repetirlo? Los temas son muchos. Al tiempo.