Cataluña

Tijeretazo a la campaña electoral

Sánchez-Camacho pide una reunión de todos los partidos para consensuar una contención del gasto.

Sánchez-Camacho presentó ayer sus propuestas tras reunirse con el comité ejecutivo del PP de Cataluña
Sánchez-Camacho presentó ayer sus propuestas tras reunirse con el comité ejecutivo del PP de Cataluñalarazon

BARCELONA- La crisis obliga a la mayoría de ciudadanos a apretarse el cinturón y los responsables públicos no quieren cargar con la sospecha de aflojárselo en un momento de tanta dificultad. Partidos como el PP de Cataluña quieren dar ejemplo y, por eso, su presidenta, Alicia Sánchez-Camacho, propuso ayer reducir los costes de la campaña electoral en un 25 por ciento, de tal manera que las arcas públicas se ahorrarían al menos cinco millones de euros. Según un informe de la Sindicatura de Comptes, el límite de los gastos electorales en las elecciones autonómicas de 2006 fue de 20,5 millones de euros, una cifra que los populares aspiran a reducir al menos en una cuarta parte. Sánchez-Camacho se dirigió ayer por carta a las direcciones de todos los partidos catalanes pidiendo una reunión de todos los responsables de campaña para consensuar un sacrificio conjunto. Los populares ya mostraron sus intenciones al PSC en una reunión con su director de campaña, Jaume Collboni, y ahora quieren materializar el ajuste porque las elecciones se aproximan. El PP catalán se mostró dispuesto a «hablar de todo», es decir, «que si se propone que el recorte sea de un 50 por ciento, por nosotros no quedará»,Fuentes próximas a Sánchez-Camacho aseguraron que al PP no le dolerán prendas por no llenar las ciudades de carteles y banderolas. Los populares son muy conscientes de que administraciones y empresas están exigiendo contención a los trabajadores y creen que no hay más remedio que sumarse a esta política.La presidenta del PP de Cataluña analizó con su comité ejecutivo el fenómeno del ajuste y, en especial, el tijeretazo anunciado recientemente por Zapatero, el cual bautizó como «zapatazo social». Sánchez-Camacho acusó al presidente del Gobierno de «pisotear los derechos de los funcionarios y los pensionistas». «No tiene ninguna credibilidad, ha enterrado su discurso social y lo ha hecho ordenado por los líderes internacionales», deploró.La dirigente popular criticó también al presidente de la Generalitat, José Montilla, como «corresponsable» del drástico recorte de Zapatero, ya que los 25 diputados del PSC en el Congreso no se han desmarcado de los planes del Gobierno. Sánchez-Camacho exigió en este punto a Montilla que presente un plan de ajuste para reducir el déficit público de Cataluña y que elimine gastos supérfluos como los de las «embajadas».

Sin solapar eleccionesLa presidenta del PP de Cataluña, Alicia Sánchez-Camacho, rechazó ayer la posibilidad de que las elecciones catalanas y las valencianas se celebren el mismo día, un rumor que se ha extendido en los últimos días. «Sería un error político», advirtió al presidente valenciano, Francisco Camps, quien, a la postre, tiene la potestad de convocar elecciones. Sánchez-Camacho quiso arropar a su correligionario, a quien calificó «de extraordinario presidente». Así lo apoyó para que dispute la reelección.