Agricultura

El PSPV hincha en 300 hectómetros el agua que ha traído el Gobierno central

Los socialistas dicen que una desaladora contamina tanto como un televisor porque no tiene chimeneas.

La Razón
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VALENCIA-Dicen que en el amor y en la guerra- del agua en este caso- todo vale, y en esas están los socialistas y populares desde hace años. El PSPV lleva meses repitiendo, ayer lo hizo una vez más, que el Gobierno central ha traído 335 hectómetros cúbicos a la Comunitat Valenciana sin la necesidad de realizar el trasvase del Ebro, un proyecto que, según defendió ayer la diputada socialista Juana Serna, sólo se ejecutará cuando no quede otra alternativa para conseguir más recursos hídricos. El delegado del Gobierno, Antoni Bernabé defendió también esta cifra e incluso se atrevió a afirmar que en dos años se duplicará la cantidad de agua.

Sin embargo, el conseller de Medio Ambiente, García Antón, desmonta punto por punto su argumentación. De los 335 hectómetros cúbicos, el PP expone que casi la mitad -147- provienen de la modernización de regadíos, unas obras que se están ejecutando desde hace diez años.

La segunda aportación más importante proviene de los pozos de sequía. En total, 98 hectómetros cúbicos que casi con toda probabilidad dejarán de utilizarse este año ya que la situación de sequía no es, de momento, tan grave como años anteriores. Para García Antón, decir que los volúmenes de agua que se han sacado de estos pozos forman parte de la solución al déficit de agua gracias al programa AGUA del Ministerio es una «tomadura de pelo».

Los siguientes 45 hectómetros cúbicos salen del embalse de Arenós. El conseller de Medio Ambiente afirma que este pantano ya estaba construido antes de que el PSOE ganara las elecciones y tiene como función evitar avenidas. Explica que el Ministerio únicamente ha realizado unas obras de emergencia para estabilizar las laderas y tiene en proyecto realizar unas infraestructuras de adecuación que permitirán embalsar 15 hectómetros cúbicos. Así, los recursos «nuevos» que aporta el actual Ministerio de Medio Ambiente se reducen a la ampliación de la desaladora de Alicante, obra que ya estaba prevista en el PP.

La diputada socialista Juana Serna defendió las plantas desalinizadoras como la única solución para acabar con el déficit hídrico. Aseguró que contaminan «tanto como nuestros televisores porque no tienen chimeneas» aunque más tarde reconoció que como grandes consumidoras de energía emiten dióxido de carbono a la atmósfera, principal causante del cambio climático. Sin embargo, recordó que a partir de 2010 las plantas desaladoras comenzarán a funcionar con energía eólica.

Trasvase escaso

El conseller de Medio Ambiente y el portavoz del Consell, Vicente Rambla, criticaron ayer que el Consejo de Ministros únicamente haya autorizado un trasvase de 48,8 hectómetros cúbicos, once de los cuales irán destinados a riegos de socorro. Aseguran que es una cantidad insuficiente y que se podría haber aportado mucho más caudal si el Gobierno central no se negara al diálogo y no cerrase la puertas a la posibilidad de traer recursos a la Comunitat mediante otros trasvases, como el del Ebro.