Feria de Málaga

Ponce prende la traca final

Enrique Ponce torea a la verónica, ayer, en la Feria de Fallas de Valencia
Enrique Ponce torea a la verónica, ayer, en la Feria de Fallas de Valencialarazon

- Valencia. 14ª de feria. Toros de Domingo Hernández y Garcigrande, justos de presentación y salvo el 1º y 6º, con dificultades. Lleno. - Luis Francisco Esplá, de violeta y oro, estocada trasera, dos descabellos, aviso (silencio); pinchazo, estocada (ovación). - Enrique Ponce, de tabaco y oro, media, descabello (saludos); estocada (dos orejas). - Vicente Barrera, de grana y oro, pinchazo, estocada, aviso (saludos tras petición); pinchazo, estocada, aviso (palmas).

Ponce impartió ayer una lección del arte de torear en sus dos toros. Preciso en la colocación, exacto en la distancia y gran sentido del temple, distinto en cada una de sus reses. Lidió a ambas con el capote observando la más rígida ortodoxia, base de sus faenas, imposibles sin esa preparación previa. A su gazapón primero le midió la distancia hasta encontrar la idónea, la corta-media. No le quitó el engaño de la vista y administró los toques para que se fijara en él. Dio siempre el paso adelante, sin dejar que el animal se distrajera. Faena honda, importante, para saborear. No fue una labor de relumbrón, sí valerosa –hacia falta mucha presencia de ánimo– y clásica. Una delicia.Nadie pensaba que el quinto toro tuviera faena, pero sí. El trabajo de Ponce con la capa, magistral. No permitió que los subalternos lo lancearan. Él lo embelesó poco a poco en los vuelos del engaño. En banderillas el toro volvió a mandar: desparramando la vista y derrotando. Los primeros pases por bajo, mandones, muleta a rastras y largos, acabaron con los vicios de la res. Los cites con la muleta adelantada y un paso adelante cuando el toro iniciaba la embestida, terminaron de dominarlo. No permitió que «pensara», atacándolo, muy cruzado, sin consentir que tocara el trapo. A partir de entonces, derechazos y naturales, relajados y cada vez más suaves y largos. Incluso aguantó un parón en la cercanía de las ingles, resuelto con suavidad. Tras bonitos pases de la firma, cuatro doblones por abajo, fijaron al animal para la suerte de matar. Esplá, que se despedía de sus paisanos, no estuvo acertado con las banderillas en su primero. Su labor con la muleta, justa y aseada, sin arrebatar. Mejoró con las banderillas con el cuarto, junto con su peón Domingo Navarro. También en la faena. El toro exigía y Esplá se entregó; en algunos momentos hubo peligro que resolvió con valentía y dignidad. Vicente Barrera, muy rígido con el tercero, escarbón pero que cuando metía la cara iba largo. Tardó en encontrarle la distancia y en dejar el engaño colocado. Al hacerlo, ligó varias series diestras buenas con estático estilo. Los naturales no resultaron igual. No acertó a tomarle la velocidad al sexto. Derechazos, muleta retrasada, limitándose a dejar pasar al toro, sin llevarlo dominado. Sufrió algunos achuchones en los naturales y así hasta el final.

Galán, a hombros en la matinalSergio Galán cosechó un importante triunfo en el festejo de rejones que se celebró en la mañana de ayer en la Feria de Fallas. Realizó el jinete un labor redonda, cuajada, de buenos planteamientos y bien rematada con los aceros. Falló en la suerte suprema el portugués Moura Caetano, que descordó a su antagonista, con el que anduvo muy entonado durante su actuación. Se lidiaron toros de Flores Albarrán, desiguales de juego. Antonio Domecq, ovación; Javier San José, oreja; Álvaro Montes, oreja; Sergio Galán, dos orejas; Joao Moura Caetano, vuelta al ruedo; Leonardo Hernández, una oreja. Lleno en los tendidos. Salió Sergio Galán izado a hombros de la plaza valenciana.