Estados Unidos

Trump y Guaidó sellan su alianza contra Maduro en la Casa Blanca

EE UU anunciará «medidas impactantes» en 30 días contra el régimen chavista, El presidente encargado de Venezuela es recibido por los principales líderes democráticos salvo Sánchez

Juan Guaido in Washington
Trump durante su encuentro con Juan GuaidóLeo Alvarez/Prensa Guaidó/dpaLeo Alvarez/Prensa Guaidó/dpa

Llegó la hora de la Juan Guaidó. El líder interino de Venezuela, como le había llamado la Casa Blanca, se reunió con el presidente Donald Trump. Fue una cita sin periodistas, en la que un funcionario del Gobierno adelantó a los medios que Estados Unidos tomará medidas «impactantes» contra el régimen maduro en los próximos 30 días.

Un broche memorable para un periplo que ha puesto a Venezuela en los labios de millones de estadounidenses y en las portadas de todos los periódicos, abriendo los telediarios y recordando al mundo la situación dramática, pero también la determinación de los venezolanos.

Antes de su histórica visita a la Casa Blanca, Guaidó se había reunido con el vicepresidente, Mike Pence. «Sostuvimos un encuentro con el vicepresidente», comentó Guaidó en las redes sociales, que apostó por mantener «la unión y el trabajo conjunto por la libertad de venezuela» y agradeció «la lucha firme y clara del Gobierno estadounidense junto al pueblo venezolano y nuestra región. ¡Estamos unidos, presidente Donald Trump!», concluyó el líder opositor.

La secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Stephanie Grisham, explicó que «la visita supone una oportunidad para reafirmar el compromiso de Estados Unidos con el pueblo de Venezuela y discutir cómo podemos trabajar con el presidente Guaidó para acelerar una transición democrática que ponga fin a la crisis actual».

Horas antes, durante el ya histórico el discurso del Estado de la Unión, con el Congreso en pie, el presidente al que 60 países reconocen como presidente legítimo había recibido su gran homenaje. «Por favor», le había dicho Trump, «lleve de vuelta este mensaje: todos los estadounidenses junto al pueblo venezolano en su justa lucha por la libertad». Se refería a la posibilidad de que Guaidó sea detenido no bien ponga un pie de vuelta en Venezuela. No en vano ha desafiado a la dictadura, que le había prohibido su viaje.

«Maduro es un gobernante ilegítimo, un tirano que brutaliza a su pueblo. Pero el dominio de la tiranía de Maduro se romperá», prometió Trump. En palabras de Grishman, «los dos países continuarán trabajando con nuestros socios en la región para enfrentar la dictadura ilegítima en Venezuela, y nos mantendremos al lado del pueblo venezolano para asegurar un futuro democrático y próspero».

Los actos en Washington ponen punto final a una gira en la que Guaidó se ha entrevisado con el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau; el secretario de Estado,Mike Pompeo; el «premier» británico, Boris Johnson, la canciller de Alemania, Angela Merkel, o el presidente de la República francesa, Emmanuel Macron, así como con el el vicepresidente de la Comisión Europea Margaritis Schinas

Llama poderosamente la atención que el único presidente que renunció a verlo fue Pedro Sánchez. El mismo dirigente socialista que durante varios años había actuado como aliado de los opositores venezolanos.

El encuentro en la Casa Blanca llegó después de que durante el fin de semana se especulase con una visita de Trump al Centro de Convenciones del Aeropuerto de Miami, coincidiendo con un mitin de Guaidó. Ese mismo fin de semana, entrevistado por los diairos «El Nuevo Herald» y «El Miami Herald», el enemigo público número uno de la dictadura chavista había explicado que «como presidente encargado, dentro de una sociedad global, tenemos que evaluar todas las opciones, privilegiando siempre las que nos lleven en el corto plazo a un desenlace de la situación». Cuando le preguntaron por la posibilidad de que fuera invitado a la Casa Blanca, se había limitado a comentar que «estamos trabajando en todas las opciones para reunirnos, privilegiando de nuevo que estamos llegando ya al fin de nuestra agenda y debemos regresar pronto a Venezuela».

Su esposa, Fabiana Rosales, se había reunido en 2019 con Trump. Guaidó ha concluido su viaje con un mensaje de esperanza. «Me llevo el compromiso y el apoyo de Estados Unidos hacia nuestra lucha para lograr la Libertad de Venezuela». «En nombre de millones de venezolanos que seguimos de pie y luchando», añadió, «Gracias presidente, gracias pueblo de Estados Unidos».