Internacional

La no sorpresa de Florida

Trump levanta pasiones en el sur de Estados Unidos. La economía, la seguridad y el supuesto socialismo de Biden, las claves de su victoria

Simpatizantes de Donald Trump celebran su victoria en el Café Versailles de Miami
Simpatizantes de Donald Trump celebran su victoria en el Café Versailles de MiamiWilfredo LeeAP

«Con el presidente Donald Trump al frente, en 2019 hice más dinero que nunca en mi vida (90.000 dólares). El año 2020 comenzó muy bueno, si no llega a ser por la pandemia de coronavirus, hubiera acabado incluso mucho mejor», reconoce Garbalosa, que lleva ya ocho años en Miami, a dónde llegó con su mujer y su hija. Para él, la economía es el principal motivo del apoyo de la comunidad hispana a Trump. También la seguridad, muchos de los hispanos vienen de lugares como Nicaragua o Venezuela, países con enorme tasa de violencia callejera y una vez se establecen en Estados Unidos, quieren tranquilidad para ellos y sus familias. Ante las imágenes de vandalismo y violencia después de, por ejemplo, las protestas por las injustas muertes de ciudadanos afroamericanos a manos de la Policía, ellos se alinean con el mandatario y su lema de «Ley y orden».

Pero a decir verdad, el motivo más repetido entre las decenas de hispanos que finalmente votaron por Trump entrevistados por este diario se puede resumir en que, para ellos, «Biden es socialista». «Sé bien lo que pasa cuando entra el socialismo en un país y no quiero esto para EE UU», incide Garbalosa. Un mensaje que ha calado en Florida y ha dado la victoria a Trump.

El presidente «Trump ha jugado una tarjeta que todavía está muy cerca del dolor de muchos cubanos y él juega con las emociones de los cubanos-americanos en particular con el tema de la libertad de Cuba. En muchos sentidos la Guerra Fría acabó en todo el mundo menos en Cuba y el muro de Berlín que queda es el Estrecho de la Florida», indicó a LA RAZÓN Joe García, ex miembro demócrata de la Cámara de Representantes.

A tenor de los carteles en los jardines de los estadounidenses y de las pegatinas y banderas en los coches de Miami, que Florida se tornase rojo no ha sido una sorpresa. Aquí no hay una mayoría silenciosa, sino ruidosa, que no duda en poner la salsa de «Oh my god, Oh my god, yo voy a votar por Donald Trump a todo volumen». En el sur de Florida votar al magnate no es algo que se oculte, al contrario. Y si alguien tenía dudas de lo que iba a suceder en el tercer Estado más poblado de EE UU, el último mitin del presidente en el aeropuerto de Opa-locka, dejó claro que Trump levanta pasiones en entre los ciudadanos de Florida. Miles de personas, en plena pandemia y aumento de casos de coronavirus, aguardaron durante más de cuatro horas, apelotonados, pero con enorme entusiasmo y expectación para ver a Trump de cerca. «Por mi cantante favorito no esperaría tanto tiempo, por mi presidente sí», explicó Ricardo a LA RAZÓN de camino a las gradas del aeródromo. «Te queremos a ti, te queremos a ti», le gritaba el público femenino al mandatario durante su discurso.

En el Estado de Florida, sin embargo, los sondeos anunciaban una victoria demasiado ajustada para Biden, por un punto porcentual. Finalmente Trump ganó por el 51,2%, es decir 5.657.933 votos frente al 47,8% de Biden, con 5.282.894.

Una vez más, a lo largo de Estados Unidos se ven una diferencia entre el voto urbano y más rural. Lo que es el condado de Miami-Dade ha votado de forma apabullante por Biden (con un 53,41%) y hasta ha elegido a su primera alcaldesa, la demócrata Daniella Levine Cava. Pero como quedó comprobado en 2016, no sólo hay que ganar en las ciudades más pobladas para hacerse con el total del Estado.

Mariela Jewett, subdirectora del Partido Republicano de Miami-Dade, analiza las claves de la victoria de Trump en Florida. Para ella, el supuesto socialismo de Biden ha sido fundamental. «El socialismo es una manera linda de decir comunismo. Esto ha motivado a que muchas personas se registrasen por primera vez para votar este año y participasen en esta elección (a favor de Donald Trump)».

Jewett incide en que Biden está muy mayor y tiene lapsus, pero es Kamala Harris, su «número dos», la que más le preocupa. «No sale mucho en los medios porque es una persona con ideas muy viradas, pero desgraciadamente el socialismo y el comunismo están por el mundo entero, como bien sabes, y en tu país también, con todas la cosas malas que traen». En su opinión, las protestas contra la violencia policial también han alejado a buena parte del electorado a la que «le gusta vivir en un país con leyes».

Pero sin duda es «la dura propaganda contra Trump que hacen los medios de comunicación» otro de los asuntos vitales para los republicanos del sur del país. «Desde el primer día le han pintado como un monstruo, pero si ves su historia y observas su vida, –menos mal que existe Youtube y otras formas de informarse– entiendes que esta persona no tenía ninguna necesidad de ser presidente». Jewett explica que Trump «es un multimillonario que estaba feliz con sus millones, ¿para qué se va a buscar todos estos dolores de cabeza para él y su familia? Lo que es, es un gran patriota».

Para la subdirectora del Partido Republicano en Miami-Dade, Trump es también «una persona que ha hecho miles de millones de obras de caridad sin decirlo. Es una persona buena y su familia es perfecta. Sin escándalos», lo que también gusta entre las familias americanas, apunta Jewett.