Yihadismo
El Estado Islámico amenaza a los periodistas occidentales
Aprovecha el asesinato de una informadora afgana para lanzar el ataque
El Estado Islámico ha aprovechado el asesinato días pasados de la periodista afgana Malala Maiwand y su conductor en la provincia de Nangarhar, en el este de Afganistán, para amenazar a los periodistas que publican informaciones que les molestan lo que, dado el fanatismo de los terroristas, es relativamente sencillo.
Según publican diversas webs especializadas, la banda yihadista, al informar del citado crimen, hace extensible la amenaza a otros periodistas, incluidos los europeos. No se trata, en cualquier caso, de ninguna novedad después del atentado contra el semanario francés Charlie Hebdo.
El asesinato de Malala Maiwand se produjo en la cuidad de Jalalabad, capital de Nangarhar, cuando la periodista se trasladaba de su casa a su oficina. El Estado Islámico (EI) se hizo responsable del crimen a través de sus cuestas en las redes sociales. Maiwand trabajaba como presentadora en el canal de la televisión local Enakas.
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Pasividad ante la tragedia