El primer ministro de Eslovenia, el populista de derechas Janez Jansa, superó este lunes una moción de censura presentada por cinco partidos de centro izquierda que critican que aleje al país de los valores europeos, así como sus tendencias autoritarias.

La alianza opositora solo pudo sumar un total de 40 votos en una Cámara de 90 diputados, con lo que quedó muy lejos de los 46 que necesitaba para derrocar al Gobierno del veterano Jansa, de 62 años.

La oposición no logró sumar ni los 43 votos con los que cuentan los cinco partidos que la presentaron.

La votación se ha producido cuatro meses antes de que Eslovenia asuma la presidencia semestral de la Unión Europea (UE) y 11 meses después de que Jansa formara un Ejecutivo de coalición, el tercero que encabeza en su larga carrera política.

El primer ministro se limitó a decir en su cuenta de Twitter que seguirá trabajando para luchar contra la pandemia de coronavirus y para preparar la futura Presidencia del Consejo de la Unión Europea.

La oposición justificaba la moción por la necesidad de “volver a Eslovenia al camino correcto”, después de que Jansa, según ellos, alejara a Eslovenia de los valores básicos de la UE.

La oposición acusa a Jansa, un admirador del ex presidente de EE UU Donal Trump y del primer ministro nacionalista húngaro, Viktor Orban, de debilitar el Estado de derecho y la democracia en la pequeña República de dos millones de habitantes.

Esos partidos criticaron también sus malos resultados en la lucha contra la covid-19, así como medidas que consideran desproporcionadas como un toque de queda nocturno que duró tres meses y que acabó el pasado viernes.

Jansa es una figura muy polarizadora en Eslovenia y sus ataques a periodistas y a medios eslovenos ha despertado críticas de organizaciones como Reporteros Sin Fronteras.

El político, que lidera un tripartito que gobierna en minoría, calificó la moción de censura de la oposición con una “farsa destructiva” carente de un programa alternativo y llena de críticas sin fundamentos.

Argumentó que su Gobierno “salvó en medio de la pandemia de la covid-19 cientos de miles de puestos de trabajos” y que gracias a sus medidas “los ciudadanos tienen mejores perspectivas para el futuro”.

Jansa, que ya fue jefe de Gobierno entre 2004 y 2008 y entre 2012 y 2013, y su Partido Demócrata Esloveno (SDS) ganaron las elecciones de junio de 2018 con un mensaje contra la inmigración y eurocrítico, pero no pudo formar Gobierno por el rechazo de la mayoría de los partidos a pactar con él.

Tuvo que esperar a marzo de 2020 para ser investido primer ministro, tras la dimisión dos meses antes del centrista Marjan Sarec debido a la debilidad de su coalición de cinco partidos.