Análisis

“¡Ni Macron ni Le Pen! ¡Ni cólera ni peste!”: por qué los dos candidatos dividen tanto a los franceses

Este es el lema escuchado en algunas protestas durante la campaña. El profesor James Shields explica por qué los dos líderes despiertan tanta polarización

Macron y Le Pen
Macron y Le PenDPA vía Europa PressDPA vía Europa Press

La segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Francia no acabarán en sorpresa, según el análisis de la mayoría de las encuestas realizadas durante la campaña electoral. Sin embargo no está escrito que Marine Le Pen vaya a salir derrotada frente a Emmanuel Macron. No pocos analistas recuerdan el fracaso de los sondeos en las elecciones de EEUU de 2016, cuando Donald Trump derrotó inesperadamente a Hillary Clinton, o cuando los partidarios del Brexit se alzaron con la victoria que finalmente sacó a Reino Unido de la Unión Europea.

El profesor de Política Francesa en la Universidad de Warwick James Shields analiza cuáles son las motivaciones que mueven a los franceses en las elecciones presidenciales y cómo son vistos los dos candidatos entre los votantes.

¿Cuáles son los grandes temas del final de la campaña?

El mayor problema para los votantes franceses es el coste de vida, con los precios de los alimentos, la energía y el combustible al alza. Esto está muy por delante de otros temas como la guerra en Ucrania, el sistema de salud, el medio ambiente y la inmigración. El gobierno de Macron limitó los precios del gas y la electricidad, redujo los costes del combustible y proporcionó un subsidio energético para los hogares de bajos ingresos. Le Pen propone recortar el IVA sobre la gasolina, el gas y la electricidad, y eliminarlo por completo de los bienes esenciales. ¿Hasta qué punto influirán estas medidas en los votantes? Esa es una de las muchas incertidumbres en esta elección.

Parece que una mayoría de franceses no quiere ni a Macron ni a Le Pen.

Tanto Macron como Le Pen son candidatos muy divisivos. Entre ellos esperaban esta revancha desde hace mucho tiempo, pero las encuestas muestran que no esta segunda vuelta con ellos de candidatos no es algo que desearan ver muchos franceses. Las protestas estudiantiles de la semana pasada estuvieron dirigidas contra ambos candidatos: “¡Ni Macron ni Le Pen!”. “¡Ni peste ni cólera!”, como dicen algunos con enfado. Hay apetito en Francia por propuestas políticas diferentes. La victoria de Macron en 2017 desencadenó todo esto. El rechazo que muchos sienten hacia ambos candidatos es peligroso para quien resulte elegido.

¿Por qué ambos candidatos despiertan tanta división?

La política populista de Le Pen es profundamente divisiva e insiste en las fracturas dentro de la sociedad: entre franceses y extranjeros, el pueblo y las élites, patriotas y globalistas, “nosotros” y “ellos”. Ella ahora ha cultivado una imagen más amigable, pero sus políticas siguen siendo tan discriminatorias y divisivas como siempre. Macron es un centrista liberal pero no ha sido un presidente unificador. Sus políticas y su estilo han alienado a muchos dentro de la sociedad francesa, desde el movimiento de los “chalecos amarillos”, pasando por las grandes protestas contra la reforma de las pensiones hasta aquellos que se niegan a vacunarse contra la covid. Cualquiera que sea el candidato elegido, gobernará un país dividido y fragmentado que necesita unificarse; pero pocos pensarán que Macron o Le Pen son candidatos para unificar Francia.

¿Cómo cambiarían Francia y la UE si Le Pen gana el domingo?

Aunque ya no pide “Frexit” (la salida de Francia de la Unión Europea), Le Pen busca socavar a la UE desde dentro. Sus políticas (dar prioridad a los ciudadanos franceses en el empleo, la vivienda y las prestaciones sociales; primacía de la ley francesa sobre las leyes europeas; recortar la contribución de Francia al presupuesto de la UE) la pondrían en un proceso de colisión con las normativas y las instituciones de la UE. Su programa reclama una “Alianza Europea de Naciones” y el fin del proyecto de un “superestado federalista impulsado ideológicamente”. No podría haber una declaración más clara de cómo Le Pen desea debilitar la UE, una organización que Macron busca fortalecer.

¿Cree que el debate electoral ha supuesta la la normalización de la política de extrema derecha en Francia?

La política de extrema derecha es una marea que sigue aumentando en Francia. En 2002, Jean-Marie Le Pen llegó a la segunda vuelta presidencial contra Jacques Chirac y obtuvo un 18% frente a un enorme “frente republicano” de oposición. Hace cinco años, Marine Le Pen ganó el 34 % en la segunda vuelta contra Macron; ahora, se le atribuye el 40-45%. En 2002, Chirac se negó a debatir con “la extrema derecha”. Macron no solo debatió con Marine Le Pen por segunda vez; él no la calificó ni una sola vez como una candidata de “extrema derecha” y en cambio se refirió a su intercambio de ideas como “respetable”. Esa es la distancia que ha recorrido la extrema derecha en Francia en 20 años.