Defensa

El Gobierno sueco descarta convocar un referéndum sobre el ingreso en la OTAN

Stoltenberg asegura que “Suecia y Finlandia serían recibidos con los brazos abiertos” si solicitan su adhesión

El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, junto a la presidenta de la Eurocámara, Roberta Metsola, este jueves en Bruselas
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, junto a la presidenta de la Eurocámara, Roberta Metsola, este jueves en BruselasOLIVIER HOSLETAgencia EFE

El Gobierno sueco no someterá a referéndum la eventual adhesión del país nórdico a la OTAN. Así lo confirmó este jueves la primera ministra, la socialdemócrata Magdalena Andersson. “Pienso que es una mala idea por diferentes motivos. Es un tema que no creo que sea adecuado para una consulta popular”, aseguró.

“Hay mucha información sobre seguridad nacional que es confidencial, por lo que hay cuestiones importantes en un referéndum de este tipo que no se pueden discutir y hechos importantes que no se pueden poner sobre la mesa”, reconcía la líder del Partido Socialdemócrata, que actualmente se encuentra revisando su tradicional postura contraria a la integración sueca en la Alianza Atlántica.

Con estas declaraciones, Andersson descartaba la exigencia de la líder del Partido de la Izquierda, Nooshi Dadgostar, de consultar a los ciudadanos una relevante decisión que rompería con el tradicional no alineamiento militar de Suecia. “Esta es quizás la decisión política más importante que toma nuestra generación de políticos”, declaró Dadgostar a la televisión pública SVT, por lo que “el pueblo sueco necesita escuchar los beneficios pero también los grandes riesgos que existen con la membresía de la OTAN”.

Solo la extrema izquierda reclama someter a referéndum la solicitud de adhesión a la OTAN que ahora discuten los partido políticos en el Parlamento (”Riksdag”) ante la nueva situación de inestabilidad provocada por la invasión rusa de Ucrania. El Gobierno ha adelantado al 13 de mayo la presentación del informe sobre seguridad y defensa que podría concluir con el ingreso en la OTAN que apoya la oposición de centro derecha. Según un reciente sondeo de Demoskop para el diario “Aftonbladet”, un 57% de los suecos apoya la adhesión, frente al 51% de hace un mes.

El líder conservador, Ulf Kristersson, cree que “los votantes... no son ingenuos acerca de Rusia”. “Está muy claro que los votantes suecos entendieron lo que sucedió el 24 de febrero y sacaron sus conclusiones”, añadió el líder del Partido Moderado en declaraciones a “Aftonbladet”.

Tampoco el recién elegido presidente de los liberales, Johan Pehrson, ve necesario someter a referéndum la entrada en la Alianza Atlántica. “Debemos asegurarnos de que Suecia se convierta en parte de esto y luego el ‘Riksdag’ es el lugar adecuado para tomar esta decisión. Tenemos un debate en el Parlamento, donde todas las partes deben anunciar su posición para que luego tomemos una decisión, explicó Pehrson.

Mientras, desde Bruselas, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, reiteró que Suecia y Finlandia serán recibidas con los brazos abiertos en caso de que decidan llamara a las puertas de la alianza militar. “Por supuesto, corresponde a Suecia y Finlandia decidir si quieren postularse para ser miembros de la OTAN o no, pero si deciden postularse, Finlandia y Suecia serían recibidos con los brazos abiertos en la OTAN”, indicó Stoltenberg ante la Prensa.

El secretario general de Alianza subrayó que los dos países nórdicos son los socios más cercanos a la organización desde que se integraron en la Alianza de la Paz en 1994. Suecia y Finlandia son “democracias fuertes y maduras, miembros de la Unión Europea”. “Hemos trabajado con Finlandia y Suecia durante muchos años, sabemos que sus Fuerzas Armadas cumplen los estándares de la OTAN, son interoperables con las fuerzas de la OTAN, entrenamos juntos, hacemos ejercicios juntos, y también hemos trabajado en muchas misiones y operaciones diferentes”. glosó tras su encuentro con la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola.

Stoltenberg se mostró convencido de que podrían llegar a “acuerdos de seguridad” durante el período interino desde que pidiesen su ingreso hasta que éste culminase con su ratificación formal por parte de los Parlamentos de los 30 aliados “para que no haya incertidumbre sobre el derecho de Finlandia y Suecia de elegir su propio camino”. El proceso podría prolongarse entre seis y veinte meses. En su opinión, “cuando Rusia intenta intimidar, amenazar a Suecia y Finlandia para que no se postulen, demuestra cómo Rusia no está respetando el derecho básico de cada nación de escoger su propio camino”.

Por su parte, desde Atenas, donde se encuentra de viaje oficial, la primera ministra de Finlandia, Sanna Marin, subrayó qué aportaría su país a la Alianza Atlántica: “Tenemos un ejército moderno y podemos trabajar con la OTAN, como hemos hecho durante décadas en ejercicios conjuntos”. “Si nos unimos contribuiremos a la seguridad de toda la alianza”, añadió Marin, que insiste que la decisión sobre la adhesión será “una cuestión de semanas, no de meses”.

“El Parlamento y el Gobierno, junto con el presidente están evaluando todos los cambios” en cuanto a la guerra en Ucrania, por lo que “muy pronto” se tomará una decisión respecto a un posible ingreso de Finlandia en la OTAN, que es respaldada por el 62% de la población. Un giro de 180% grados con respecto a hace un año, cuando solo el 20% era partidario de abandonar su no alineamiento militar.

En pleno debate parlamentario sobre su futura política de seguridad y defensa, Suecia y Finlandia podrían anunciar en la segunda quincena de mayosu decisión de llamar a las puertas de la Alianza Atlántica.