Altos oficiales rusos se amotinan en Vulhedar tras la amenaza del jefe de Wagner

El malestar en las tropa rusas sigue creciendo pese a los avances en la ciudad de Bajmut. Varias informaciones apuntan a un motín entre altos oficiales rusos que se han negado a seguir combatiendo en la encarnizada batalla de Vuhledar, en el Donbás, después de sufrir grandes pérdidas durante un asalto fallido contra esta ciudad del este de Ucrania. Se estima que Rusia perdió unos 130 tanques y vehículos blindados de combate en el desastroso ataque contra esta localidad. El motín se produce un día después de que el jefe de la compañía rusa de mercenarios Wagner, el empresario Yevgueni Prigozhin, dijera que si sus soldados se retiran de Bajmut, todo el frente ruso en Ucrania se desmoronará. También alertó contra la falta de armas avanzadas y de una supuesta traición del ministro de Defensa ruso Serghei Shoigu hacia sus tropas de mercenarios.

“Los líderes de la brigada y los oficiales superiores se niegan a proceder con un nuevo ataque sin sentido como lo exigen sus comandantes no cualificados: asaltar posiciones ucranianas bien defendidas con poca protección o preparación”, dijo el ejército de Ucrania. La afirmación no ha podido ser verificada pero se produce después de que las tropas movilizadas de Siberia se quejaran de ser “carne de cañón” en un viíeo dirigido al presidente Putin.

Pero la cosa no quedó ahí. En Londres, el Ministerio de Defensa ha revelado que una fuerza de élite rusa que esperaba recibir el tanque de última generación de Moscú, el T-14 Armata, podría recibir tanques T-62 de fabricación soviética que datan de 1961. Los expertos militares aseguran que este valioso tanque, el T-14 Armata, no ha sido desplegado en condiciones en la guerra de Ucrania debido a los problemas de fabricación vinculados a las sanciones occidentales impuestas a Rusia por la guerra, lo que ha frenado el buen funcionamiento de la cadena de montaje.

El Ministerio de Defensa británico informó de que los viejos T-62 han sido modernizados en su sistema de observación para mejorar su efectividad durante la noche. Sin embargo, también reveló que "este tipo de vehículos antiguos presentarán muchas vulnerabilidades en el campo de batalla moderno, incluida la ausencia de armaduras reactivas explosivas modernas".

Al advertencia de Shoigu

La inminente toma de Bajmut permitirá a las fuerzas rusas montar más operaciones ofensivas, adelantó Serghei Shoigu, el ministro de Defensa ruso. El general también dijo que Occidente estaba aumentando sus entregas de armas a Ucrania, pero prometió que no cambiaría el curso de los acontecimientos en el campo de batalla.

Aproximadamente cinco soldados rusos han muerto por cada soldado ucraniano muerto en la batalla de Bajmut, según la OTAN. Un funcionario no identificado de la alianza atlántica le dijo a CNN que la proporción de muertes de cinco a uno era una estimación basada en la inteligencia del bloque. Sin embargo, el funcionario señaló que Ucrania también estaba sufriendo grandes pérdidas en su defensa de la ciudad.