Violencia armada

‘Ghost guns’: Así son las armas fantasma que EE UU pretende limitar ante el creciente número de tiroteos

Internet ofrece la posibilidad de comprar una pistola sin número de serie para montar en casa y evitar que las autoridades puedan rastrearla

Las ‘ghost guns’ están contribuyendo a un aumento de la violencia armada en EE UU
Las ‘ghost guns’ están contribuyendo a un aumento de la violencia armada en EE UUHaven DaleyAgencia AP

La Cámara Baja de Estados Unidos, de mayoría demócrata, aprobó este miércoles una iniciativa para reforzar los controles de armas de fuego. Sin embargo, es muy posible que no salga adelante en el Senado, ya que los demócratas tienen una estrecha mayoría en esa cámara.

El proyecto de ley contiene las medidas más duras para limitar las armas que ha aprobado en décadas la Cámara de Representantes. Propone aumentar de 18 a 21 años la edad a la que se pueden comprar rifles semiautomáticos y prohíbe los cartuchos de gran capacidad para balas, utilizados en Uvalde y Buffalo por jóvenes de 18 años.

Asimismo, propone medidas para regular las “ghost guns” (armas fantasma) por carecer de número de serie y que son responsables de un creciente número de tiroteos. Cuando hablamos de estas “ghost guns” hablamos de armas de fabricación casera que uno mismo puede fabricar en su propia casa con una impresora 3D o a partir de un kit con las piezas.

Su precio medio es de unos 500 dólares, pero uno puede llegar a hacerse una pistola en casa por sólo 200 dólares. “Hoy en día, la gente puede sentarse en el salón de su casa, conectarse su ordenador, acceder a un programa informático, enviar una señal a su impresora e imprimir una ametralladora que puede matar a la gente. Eso es un problema”, aseguró a la CBS el subcomisario de inteligencia y contraterrorismo de la Policía de Nueva York, John Miller.

Según la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos de EE UU (ATF), las armas fantasma está contribuyendo a un aumento de la violencia armada. Son un problema creciente. La razón está en que estas pistolas no están registradas y por lo tanto no se pueden rastrear. Ahora mismo, en Norteamérica la ley existente no regula la mayoría de las piezas.

Del mismo modo, la persona que compra una “ghost gun” no está obligada a mostrar sus antecedentes (como sí lo están los compradores de armas en un establecimiento físico). No hay control: se entra en una web (hasta en Amazon se venden), se elige el modelo y se compra como si de una cafetera o un teléfono móvil se tratara.