Consejo Europeo

El debate migratorio ensombrece la Declaración de Granada para ampliar la UE

El Consejo Europeo consigue una declaración conjunta sobre la carpeta del futuro europeo, pero no logra la unanimidad con la inmigración

GRANADA, 06/10/2023.- El presidente en funciones del Gobierno español, Pedro Sánchez (i), entre otros, tras la foto de familia después de la reunión de los Veintisiete, este viernes en Granada, que participan den la cumbre informal que tiene lugar dentro de la presidencia española del Consejo de la UE. EFE/ Miguel Angel Molina
Reunión de los Veintisiete en Granadamiguel angel molinaAgencia EFE

Los 27 países que componen la Unión Europea alcanzaron el miércoles un acuerdo frágil sobre migración con el objetivo de que no opacara el debate sobre la ampliación de la UE en el Consejo Europeo que se ha celebrado este viernes en Granada. Sin embargo, la Cumbre ha demostrado que el pacto migratorio ha quedado cerrado en falso y se ha colado con mucha fuerza en Granada, hasta el punto de haber empañado el debate sobre la ampliación del club comunitario. Pese a todo, se han salvado los muebles y ha habido declaración conjunta sobre el futuro de Europa, que era el objetivo.

Hungría y Polonia han tratado de forzar que la inmigración quedara incluida en la declaración conjunta (un texto que sirve para orientar la política de la UE), pero no lo han logrado. Las desavenencias entre los 27 se han saldado con la exclusión del párrafo sobre la inmigración del texto. Pedro Sánchez ha querido relativizar esta circunstancia al asegurar que la Cumbre en Granada se había convocado para abordar el futuro de la UE y, por tanto, a su juicio, no queda ensombrecida por la inmigración. "No lo empaña, sabíamos que era uno de los riesgos. Giorgia Meloni nos había pedido que introdujéramos este punto en el orden del día vinculado con la migración, pero no olvidemos que Granada estaba convocada para hablar de la agenda estratégica y la ampliación", ha señalado Sánchez, ante la reiteración de preguntas en la rueda de prensa posterior.

Ursula von der Leyen ha confiado en "encontrar una solución" para los problemas migratorios y ha puesto el acento en tomar medidas "más operativas", poniendo la vista sobre la dimensión exterior: es decir, sobre los países de origen y de tránsito de los inmigrantes. "La inmigración ha existido siempre y va a seguir existiendo. Lo importante es gestionarla bien", ha señalado la presidenta de la Comisión Europea, quien ha dicho que es tan importante abordarla interiormente (tanto internamente como en las fronteras europeas) como en el exterior (países de origen y de tránsito). De hecho, ha desvelado que el abordaje de la vertiente exterior ha concitado el apoyo de muchos países. "Hay que luchar contra las mafias porque es delincuencia organizada", ha aseverado.

Los 27 alcanzaron el miércoles un pacto sobre migración para reforma el Reglamento sobre situaciones de crisis, aunque se quedó sin el apoyo de cinco países: Hungría y Polonia votaron en contra y han querido alzar la voz contra el pacto este viernes con un tono duro.ViktorOrbán (Hungría) ha comparado ese acuerdo con una "violación" porque se obliga a su país a hacer algo que no quiere mientras que MateuszMorawiecki (Polonia) ha mostrado su rechazo al advertir que va a permitir una "inmigración ilegal masiva" que luego pagarán todos los países porque será distribuida entre los distintos Estados. Austria, República Checa y Eslovaquia se abstuvieron en la votación del miércoles.

Tal ha sido el tono duro de Hungría y Polonia que la presidenta del Parlamento Europeo Roberta Metsola ha salido al paso y, en paralelo a la celebración del Consejo Europeo, ha pedido "no matar" el acuerdo sobre migración antes de que empiece a aplicarse. De hecho, todavía está en fase de trámite porque se tiene que negociar ahora con la Eurocámara. El acuerdo del miércoles es el último de una serie de cinco reformas reglamentarias para cambiar el modelo de Migración y de Asilo, un arduo trabajo que ha llevado cuatro años y que ha tensionado las costuras de la UE.

De hecho, la migración se ha convertido en un tema con mucho peso electoral y puede marcar las elecciones europeas previstas para junio del año que viene y, sobre todo, va a tener un gran impacto en la cita con las urnas del próximo 15 de octubre en Polonia. El presidente polaco es consciente de ello y de ahí su presión con el pacto migratorio.

Y el clima preelectoral también se nota en los virajes retóricos de algunos líderes políticos. En este sentido, Von der Leyen ha apelado a la intención de ser "más estrictos" con las llegadas de inmigrantes ilegales mientras que Josep Borrell ha planteado dar apoyo a los países del Sahel para el control de sus fronteras para frenar la inmigración ilegal antes de que llegue al perímetro europeo.

A la conclusión del Consejo Europeo, Giorgia Meloni (Italia) y Olaf Scholz (Alemania) mantuvieron un encuentro para abordar los temas migratorios porque el pacto del miércoles había generado discrepancias entre ambos mandatarios, ya que Meloni exigía más mano dura que Scholz, muy condicionado por los Verdes, que forman parte de su Gobierno. Además, Meloni organizó ayer jueves un encuentro junto a Rishi Sunak (Reino Unido) para abordar la lucha contra la trata de personas, una reunión en la que también estuvieron Emmanuel Macron y Von der Leyen.

Sunak y Meloni han unido fuerzas en el tema migratorio y este mismo viernes han publicado una carta conjunta en la que piden que todos los países de Europa trabajen juntos con "urgencia" para "detener" las embarcaciones que tratan de llegar a las costas.