Sucesos

Al menos dos muertos y un herido en un tiroteo en la ciudad suiza de Sion

El presunto autor de los hechos, Sebastian Robin de 36 años, aún no ha sido detenido, según fuentes policiales citadas por la televisión nacional RTS

Agentes de Policía en la zona acordonada de Sion
Agentes de Policía en la zona acordonada de SionAgencia EFE

Un hombre armado ha disparado este lunes sobre varias personas en dos ubicaciones distintas de la ciudad suiza de Sion, causando al menos dos muertos y un herido, indicaron fuentes policiales citadas por la televisión nacional RTS, que ha desplegado un amplio dispositivo en todo el cantón de Valais para intentar detener al agresor.

Las autoridades policiales han emitido una nota pública de búsqueda del principal sospechoso, Sebastian Robin, de 36 años, advirtiendo a la ciudadanía de que se trata de un individuo "peligroso", por lo que quienes lo identifiquen "no deben intentar detenerle o acercarse a él". Según la televisión nacional RTS, podría conducir un Peugeot 206 gris metalizado con matrícula en Valais, cantón del que Sion es capital.

Los ataques se iniciaron hacia las 08.00 horas en el polígono industrial de Ronquoz de Sion, una ciudad situada en el valle del Ródano, a los pies de grandes cumbres alpinas. Toda la zona industrial está acordonada por la policía, indicaron medios locales, que señalaron que el agresor primero disparó contra una mujer en un aparcamiento cercano y más tarde en una empresa de enlucidos.

Aunque se ignoran las motivaciones del agresor, según la Policía no se trata de ataques indiscriminados, ya que al parecer conocía a las víctimas. De acuerdo con el diario local Blick, podría haber conflictos previos entre el agresor y el dueño de la empresa.

Este tipo de tiroteos son extremadamente raros en Suiza, pese a ser uno de los países de Europa con mayor tasa de posesión de armas por habitante.

Hay aproximadamente un arma de fuego por cada cuatro suizos (27 por cada 100 habitantes) debido, entre otros factores, a que el servicio militar es obligatorio para los hombres y una vez terminado los reclutas pueden guardar en sus casas el armamento con el que han sido instruidos.