Política

Terrorismo yihadista

La reaparición de Baghdadi coincide con los planes de un Ramadán “sangriento”

El mes sagrado musulmán comienza el próximo lunes y Daesh prepara nuevos atentados

Imagen del vídeo publicado la semana pasada por Abu Bakr al-Baghdadi
Imagen del vídeo publicado la semana pasada por Abu Bakr al-Baghdadilarazon

El lunes comienza el Ramadán, mes sagrado para los musulmanes, período en el que, tradicionalmente, los grupos yihadistas intensifican sus acciones terroristas dentro de la mitificación que pretenden dar a los atentados.

El próximo lunes comienza el Ramadán, mes sagrado para los musulmanes, que finalizará el 4 de junio, período en el que, tradicionalmente, los grupos yihadistas intensifican sus acciones terroristas dentro de la mitificación que pretenden dar a los atentados.

Expertos consultados por LA RAZÓN llaman la atención de que el mensaje en vídeo del cabecilla de Daesh, Abu Bark Baghdadi, se haya producido pocas fechas antes del inicio del Ramadán. No descartan que su “rival” Al Qaeda haga lo propio en los próximos días, a través de Ayman Al Zawahiri o persona que les represente. El mensaje de Baghdadi, ampliamente analizado desde su difusión, con las más variadas interpretaciones, contenía, entre líneas, algunos mensajes para cohesionar a sus combatientes con el fin de que cometan más atentados durante ese período, aunque no hiciera una mención concreta.

En especial, iría dirigido a los actores, los mal llamados “lobos”, solitarios, a los que la reaparición de su líder les podría animar a perpetrar acciones criminales. De hecho, Baghdadi subrayaba que la lucha no terminará hasta que la nación del Islam se imponga “sobre la nación de la Cruz”.

El año pasado, durante el Ramadán, Daesh se mostró especialmente activo, con atentados contra iglesias en Surabaya (Indonesia), que causaron una decena de muertos, un acuchillamiento en la calles de

París y otras acciones criminales. "Preparaos para hacer de éste un mes de calamidad para los infieles allá donde estéis", amenazaban entonces los cabecillas, dentro de la dinámica de transmitir que cualquier acción durante el “mes sagrado” contra los “cruzados infieles” será doblemente premiada en el paraíso.

En concreto, según los historiadores, los jefes yihadistas recuerdan la batalla de Badr, durante el Ramadán de 624 d.C. Las tropas musulmanas vencieron a sus enemigos, que les ganaban en número. En

defitiva, Mahoma doblegó a sus rivales de la Meca El yihadismo vincula el ramadán con lo que denominan “guerra santa”. Y considera que los musulmanes deben mostrarse especialmente belicosos

con los infieles.

El que fuera portavoz de Daesh, Al Adnani, abatido por la Coalición Internacional, dijo en su día que el Raamadán debía ser un “un mes de conquista y de yihad” siguiendo la estela de la batalla de Badr.