Estados Unidos

Nancy, la actriz que se convirtió en otra estrella de la bandera

La viuda de Ronald Reagan fallece a los 94 años

Barack Obama acompaña a Nancy Reagan en una imagen de 2009.
Barack Obama acompaña a Nancy Reagan en una imagen de 2009.larazon

Fallece a los 94 años la ex primera dama y eterna compañera de Ronald Reagan en su ascenso a la Casa Blanca.

Nancy Reagan, la viuda del ex presidente republicano de Estados Unidos murió de un fallo cardiaco ayer a los 94 años en su casa de Los Ángeles, según informó su portavoz, Joanne Drake. Con su muerte Estados Unidos despide a un símbolo de la política y sociedad de sus años ochenta y al recuerdo de una Presidencia que marcó a las generaciones posteriores.

Siempre hubo dos Nancy Reagan. La que dejó su carrera de actriz para permanecer junto a Ronald Reagan, al que adoraba, y la que contrató y fulminó a su equipo de campaña durante la nominación republicana de 1976 y las presidenciales de 1980. Todo después de haber ayudado a Ronald a pasar de actor de Hollywood a gobernador de California primero y a presidente de EE UU después. La primera dama no dudó en cargar en 1987 contra el jefe de Gabinete de la Casa Blanca, Donald T. Regan, al que culpó de que saliese a la luz la venta secreta de armas a Irán para financiar a la contra nicaragüense. La primera dama no paró hasta que consiguió que su marido pidiese perdón por el escándalo en un discurso en televisión que frenó su caída en las encuestas.

Ex actriz, entró en política cuando su marido fue elegido gobernador de California en 1966. Más tarde le acompañó a la Casa Blanca en 1981. Como primera dama se implicó en la causa «Simplemente di no», una campaña dedicada a advertir a los jóvenes contra el abuso de drogas. Su mensaje fue utilizado por diferentes organizaciones en todo el país.

Siempre a la cabeza de la lista de las mujeres más elegentes, Nancy ayudó a dar a conocer a diseñadores estadounidenses como James Galanos y el fallecido Óscar de la Renta, de origen dominicano. También protagonizó diferentes escándalos cuando se negó a publicar el coste de su vestuario y la decoración de la Casa Blanca. Peor fue su idea de cambiar la porcelana de la residencia oficial. O cuando consultó a un astrólogo después del intento de asesinato en 1981 de su marido. Tras ser diagnosticado el Alzheimer a Reagan, se centró en su cuidado hasta su muerte en 2004. Incluso, se enfrentó al presidente George W. Bush por su oposición a la investigación con células madre para combatir esa enfermedad. Su hijo Ron Reagan pronunció un discurso en la Convención Demócrata en Massachusetts en julio de 2004 a favor de este tipo de investigación, cuya restricción levantó Barack Obama.

Nacida en Nueva York el 6 de julio de 1921, su madre era actriz y su padre vendedor. Éste las abandonó cuando Nancy tenía 7 años, y a partir de ahí su vida fue inestable debido a la incertidumbre económica, hasta que su madre se casó con un conocido médico de Chicago. Actriz de éxito discreto. apareció en más de una docena de películas en los años 40 y 50.

Conoció a Reagan cuando éste dirigía el Sindicato de Actores. Fue ella la que se acercó a él porque necesitaba su ayuda para que sacase su nombre de una lista de profesionales que simpatizaba con el comunismo. Quedaron a cenar en un restaurante de Hollywood para que Nancy le explicara que su nombre se parecía al de otra actriz. Reagan estaba convaleciente de una fractura en la pierna durante un partido benéfico de béisbol, y fue mucho menos entusiasta, también porque todavía tenía esperanzas de reconciliarse con su mujer, la actriz Jane Wyman. Pero a finlaes de 1949 Ronald empezó a quedar con Nancy en serio. Cuando ella fue aceptada en el Consejo del Sindicato de Actores, cenaban cada lunes. Se casaron en 1952. Tuvieron dos hijos: Patti, que nació ese mismo año, y Ron, en 1958. Pero no todo fue de película. La señora Reagan tuvo problemas con sus hijos y los de su marido, Maureen y Michael, nacidos de su primer matrimonio.

Nancy Reagan será enterrada en la Biblioteca Presidencial Ronald Reagan en Simi Valley junto a su marido. Antes del fallecimiento del presidente republicano, Nancy reconoció a la revista «Vanity Fair» que «cuando digo que mi vida empezó con Ronnie, es verdad. Así fue. No puedo imaginármela sin él». La recopilación de cartas de amor a su marido se convirtió en uno de los libros más vendidos del año 2000. En su libro de memorias «My Turn: The Memoirs of Nancy Regan», publicado en 1989, reconocía que su Ronald «era todo lo que yo quería en un hombre, y más». Su amor siempre fue correspondido. «Nunca me he despertado aburrido. Lo único malo es que ella me hace ser un cobarde. Cuando no la veo, estoy preocupado por ella», admitía el ex presidente.