Oriente Medio

El mundo árabe celebra la tregua entre Israel y Hamás: "Es un momento histórico"

Arabia Saudí, Turquía, Jordania, Líbano y Egipto instan a las dos partes a llevar a la práctica el acuerdo

La satisfacción y el alivio reinaron este jueves en las cancillerías de la región tras el acuerdo alcanzado en la madrugada de este jueves por Israel y Hamás tras más de tres jornadas de conversaciones indirectas celebradas en la ciudad egipcia de Sharm el Sheij, todo ello con la plena implicación de Qatar, Egipto, Turquía y Estados Unidos.

Un acuerdo que, diez días después de que el presidente estadounidense Donald Trump presentara un plan de paz en presencia del primer ministro israelí Benjamin Netanyahu permite la consecución del alto el fuego entre las partes y sienta las bases para el fin definitivo del conflicto en Gaza después de dos años.

Horas después de hacerse público el acuerdo, el responsable de relaciones nacionales de Hamás y miembros de su buró político, Husam Badram, afirmaba que la “respuesta final presentada es el fruto de intensas consultas y el trabajo continuado durante las negociaciones de Sharm el Sheij mientras se continúan los encuentros con todas las facciones nacionales palestinas para asegurar una posición unificada”. A su juicio, “los palestinos merecen la vida y el derecho a la autodeterminación y el establecimiento de un Estado propio en su tierra ocupada”.

El emirato de Qatar -país fundamental en todo el proceso de negociaciones- fue, junto a Estados Unidos, el país encargado de anunciar el acuerdo para el cese de las hostilidades. En un mensaje en X, su ministro de Estado del Ministerio de Asuntos Exteriores, Mohammed bin Abdulaziz bin Saleh Al Khulaifi, aseguraba en la tarde de hoy que “la paz auténtica comienza en el diálogo que antepone la dignidad humana. La nueva fase del acuerdo ofrece esperanza para una calma duradera en Gaza y subraya el poder de la mediación basada en la razón y no en la escalada”.

Por su parte, el presidente de Egipto -otro Estado mediador desde el principio de los contactos entre Tel Aviv y Hamás- Abdelfatá al Sisi, celebraba en redes sociales el acuerdo para el alto el fuego alcanzado en su país asegurando que “el mundo asiste a un momento histórico que encarna el triunfo de la voluntad de paz sobre la lógica de la guerra”.

Además, el mandatario egipcio, que destacaba los esfuerzos de su país, Qatar y EEUU, afirmaba que el acuerdo “no solo cierra el capítulo de la guerra, sino que también abre la puerta a la esperanza para los pueblos de la región de un futuro definido por la justicia y la estabilidad”. Egipto fue el primer país árabe en reconocer al Estado de Israel en 1979.

Desde la vecina Jordania -la monarquía hachemita firmó en 1994 con Israel un acuerdo de paz, el segundo de un país de la Liga Árabe, en vigor-, su ministro de Exteriores, Ayman Safadi, insistía en que ahora “el acuerdo debe ser aplicado”.

“Jordania aprecia el papel decisivo de Trump a la hora de lograr el acuerdo y su compromiso para poner fin a la guerra, garantizar la entrega de ayuda humanitaria, evitar un desplazamiento, reconstruir Gaza, no permitir la anexión de Cisjordania y hacer los esfuerzos para lograr la paz”, resumía. Además, el canciller jordano subrayaba “los incansables esfuerzos egipcios y qataríes y valoramos también el papel jugado por Turquía”.

Desde Ankara, el presidente turco Recep Tayyip Erdogan -una de las figuras clave en el acuerdo- aprovechaba para anunciar que su país participará en el “grupo de trabajo” que velará por el cumplimiento del acuerdo para el cese de las hostilidades y aseveraba que su país contribuirá a la reconstrucción de Gaza. “Turquía supervisará de cerca la aplicación del acuerdo y seguirá contribuyendo al proceso”, afirmaba el mandatario turco al tiempo que expresaba su “sincero agradecimiento” a Trump por “mostrar la voluntad política necesaria para alentar al Gobierno israelí a aceptar un alto el fuego”.

Otra de las grandes potencias de la región, Arabia Saudí -llamada a jugar un papel destacado en la posguerra en Gaza- aplaudía a través de su Ministerio de Exteriores el acuerdo y el “inicio de la aplicación de la primera fase de la propuesta de Trump para el fin de la guerra en la Franja y allanar el camino para una paz justa y exhaustiva”. En la línea de otros países de la región, Riad elogiaba el “papel activo” del presidente estadounidense Donald Trump y “los esfuerzos de mediación” de Qatar, Egipto y Turquía.

Desde la capital saudí se expresaba asimismo la esperanza de que “este importante paso lleve a acciones urgentes para aliviar el sufrimiento humanitario del pueblo palestino en Gaza, logre una retirada total israelí, restaure la seguridad y la estabilidad, inicie pasos prácticos para lograr una paz justa y exhaustiva fundamentadas en la solución de dos Estados y el establecimiento de un Estado palestino independiente en las fronteras de 1967”.

La Casa de Saúd, que además de ser una de las grandes potencias económicas y militares de Oriente Medio ejerce un liderazgo religioso en tanto que hogar de los principales lugares sagrados del islam, ha subrayado repetidamente durante los dos últimos años que no habrá ningún reconocimiento formal del Estado de Israel -la obsesión de Trump desde la firma de los Acuerdos de Abraham en septiembre de 2020- hasta que el Estado de Palestina no vea la luz.

Desde los vecinos Emiratos Árabes Unidos -uno de los firmantes junto a Bahréin de los citados Acuerdos de Abraham hace cinco años- su Ministerio de Exteriores hacía hincapié en el “importante” papel de Trump para lograr el acuerdo para “detener la trágica guerra y trabajar para lograr paz y estabilidad en la Franja de Gaza”.

Así, la cancillería emiratí aplaudía los esfuerzos de la mediación y expresaba su deseo de que el acuerdo “suponga un paso positivo hacia el fin del sufrimiento humanitario en la Franja de Gaza que allane el camino para un acuerdo justo y duradero que garantice los derechos legítimos del pueblo palestino y restaure la seguridad y la estabilidad en la región”..

Por otra parte, desde Beirut, la Presidencia de la República libanesa expresaba su esperanza en que el acuerdo alcanzado a primera hora de este jueves “constituya un primer paso hacia un alto un alto el fuego permanente y el fin del sufrimiento humanitario del hermano pueblo palestino”, según un comunicado publicado en X.