Pruebas nucleares

Supervivientes de las bombas atómicas japonesas protestan contra la decisión de Trump de reanudar pruebas nucleares

Las bombas atómicas lanzadas por Estados Unidos sobre las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki en agosto de 1945 mataron a más de 200.000 personas

EEUU.- El Senado de EEUU vota a favor de derogar los aranceles globales de la Administración Trump
Supervivientes de las bombas atómicas japonesas protestan contra la decisión de Trump de reanudar pruebas nuclearesEuropa Press

El presidente estadounidense Donald Trump anunció que ha ordenado al Pentágono reanudar los ensayos de armas nucleares. Según sus declaraciones, la medida busca “rivalizar con China y Rusia” en el desarrollo de capacidades estratégicas. Estados Unidos no realizaba pruebas nucleares desde 1992, año en que se instauró una moratoria informal respetada por administraciones sucesivas.

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Tras el anuncio, una organización japonesa de sobrevivientes de los bombardeos atómicos de 1945, laureada con el Premio Nobel de la Paz en 2024, calificó la decisión como “absolutamente inaceptable”. Los hibakusha —como se conoce a los afectados por las bombas de Hiroshima y Nagasaki— denunciaron que la medida “rompe un tabú histórico” y pone en riesgo los esfuerzos globales por la no proliferación nuclear. Muchos de ellos han dedicado su vida a promover el desarme y la memoria de las víctimas.

Las bombas atómicas lanzadas por Estados Unidos sobre Hiroshima y Nagasaki en agosto de 1945 causaron más de 200.000 muertes. Son los únicos casos confirmados de uso de armas nucleares en conflicto armado. Los sobrevivientes han sufrido durante décadas secuelas físicas, psicológicas y sociales, además de discriminación por su condición. Para la comunidad hibakusha, la reanudación de pruebas nucleares constituye una afrenta directa a su historia.

El Congreso de Hiroshima contra las Bombas Atómicas y de Hidrógeno (Hiroshima Gensuikin) y la Federación Prefectural de Víctimas de la Bomba Atómica de Hiroshima declararon en un comunicado enviado a la Embajada de Estados Unidos que “en una guerra nuclear, toda la humanidad pierde”. La reactivación de ensayos por parte de Estados Unidos podría desencadenar una nueva carrera armamentista, especialmente en un contexto de tensiones con Rusia y China. Por su parte la organización Nihon Hidankyo también envió una carta de protesta a la Embajada de Estados Unidos en Japón. Esta directiva “va en contra de los esfuerzos realizados por las naciones de todo el mundo para construir un mundo pacífico sin armas nucleares y es absolutamente inaceptable ”, denunció el grupo en su carta, cuya copia obtuvo la agencia AFP el viernes.

Aunque el gobierno japonés no ha emitido una condena formal, medios como CNEWS informaron que diplomáticos nipones expresaron “preocupación profunda” en conversaciones privadas con sus homólogos estadounidenses. Japón, como único país víctima de ataques nucleares, mantiene una postura firme de rechazo a la proliferación. La decisión de Trump podría tensar las relaciones bilaterales en un momento clave de cooperación estratégica en Asia-Pacífico.

El presidente justificó la medida como una respuesta directa a los anuncios de Vladimir Putin sobre nuevas capacidades nucleares rusas. En paralelo, Trump se reunió con Xi Jinping en Pekín, donde abordó el equilibrio estratégico regional. La Casa Blanca no ha detallado cuándo ni dónde se realizarán las primeras pruebas, aunque confirmó que serán “subterráneas y controladas”.