El Supremo de EE UU invalida la prohibición del uso de culatas aceleradoras en armas semiautomáticas

El Tribunal Supremo de Estados Unidos invalidó el viernes la ley federal que prohibía la instalación de culatas aceleradoras de disparos en armas de fuego, una normativa impulsada por la Administración de Donald Trump y promulgada en 2018, un año después de la matanza de medio centenar de personas en un festival de música de Las Vegas, la peor de la historia de Estados Unidos.

En su dictamen de este viernes, el Supremo entiende –por seis votos a favor y tres en contra, en un dictamen apoyado por la mayoría conservadora de la corte– que la agencia encargada de emitir la prohibición, la Oficina contra el Alcohol, el Tabaco y las Armas de Fuego (ATF, por sus siglas en inglés), excedió su competencia al tomar tal decisión.

La decisión de 2018 entendía que la instalación de este acelerador, también conocido como culata aceleradora o «bump-stock», convertía al fusil de asalto en una ametralladora porque al apretar el gatillo, comenzaba una secuencia automática que producía más de un disparo merced a la energía del retroceso, aprovechada por estas culatas para volver a disparar. El dictamen, leído por el conservador Clarence Thomas, añade sin embargo que el Supremo no percibe que la instalación de este acelerador en un arma convierta automáticamente a esta última en una ametralladora.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha lamentado una decisión que «anula una importante regulación», como también rechaza que los estadounidenses «tengan que seguir viviendo con miedo ante la destrucción masiva» que provocan esta clase de armas. En su comunicado, Biden defiende la labor de la ATF y asegura que su administración garantizará que la agencia «tenga los fondos que necesita para abordar las tecnologías de armas de fuego emergentes, como los dispositivos de conversión de ametralladoras y las armas fantasma», sin número de serie o de fabricación casera «que representan una amenaza única y grave para la seguridad pública». Biden, además, reitera su llamamiento al Congreso para que apruebe una legislación específica para las armas de fuego: «Enviadme un proyecto de ley y lo firmaré de inmediato».