Isabel II agradece a Diana el futuro de la corona del pueblo

La monarca, que cumplirá en abril 90 años, admitió a un amigo cercano que sus nietos Enrique y Guillermo son los miembros más populares de la realeza británica.

Hace unos días, tomando el té con un viejo amigo, Isabel II comenzó a hablar de sus nietos como cualquier abuela orgullosa. Se refirió a todos, a los ocho que tiene, pero en el turno de Guillermo y Enrique esbozó una sonrisa. «Quizá, después de todo, tenemos mucho que agradecer a Diana», dijo.

La frase supone una revelación. La soberana sufrió de lo lindo con los distintos episodios protagonizados por la princesa del pueblo. La sacaban de sus casillas las continuas rebeliones a la hora de seguir el protocolo. No entendía por qué, entre todas las ONG con las que podía trabajar, la joven se centró en la lucha contra el sida, con todos los tabúes que existían entonces. Pero su don de gentes y la cercanía con la que trataba a los más desfavorecidos son las facetas repetidas ahora por sus hijos, que les han convertido en los más populares entre los británicos. Y respira tranquila porque sabe que el futuro de la monarquía está en buenas manos.

«Ella nunca diría que Diana no ha contribuido a la familia», asegura el amigo de la reina. «Pero cuando ve la felicidad que irradian ahora Guillermo y Enrique y el efecto que provocan en la gente, ve más que nunca a Diana», recalca, sin revelar su identidad, al «The Daily Mail». Con motivo del próximo 90 cumpleaños que Isabel II celebrará en abril, el periódico ha entrevistado a su círculo más cercano y las conversaciones sobre Lady Di no podían faltar.

Cuando el príncipe Carlos la presentó por primera vez en palacio, nada presagiaba los quebraderos de cabeza que la pareja, y la princesa en particular, iban a dar a su majestad. Venía de la dinastía de los Spencer, una familia muy bien relacionada con palacio. Tras la boda, surgieron los problemas, y aunque los rumores aseguran que entre Isabel II y Lady Di no existía química, lo cierto es que la reina intentó protegerla siempre. Incluso cuando el divorcio con su hijo era algo imposible de remediar.

«Con amor de mamá»

En repetidas ocasiones, la reina se convirtió en el paño de lágrimas de Diana. Es más, tras la separación de la pareja, anunciada en diciembre de 1992, la monarca invitó a Diana a distintas celebraciones familiares con la esperanza de una reconciliación. Sus intentos fueron en vano y cuando la ruptura era ya inevitable, Isabel II escribió una carta a cada uno para decirles que el divorcio era la mejor solución. La misiva para su nuera terminaba: «Con amor de mamá». Pese a los miedos de Diana, la reina le dijo que jamás iban a luchar por quitarle la custodia de sus hijos. La reina recuerda ahora todo aquello con la distancia del tiempo, y agradece más que nunca a Lady Di la educación que dio a sus hijos.