Famosos

Le harán otra autopsia a la Veneno

No convencidos con los resultados previos, su familia está recaudando dinero para realizarla.

Le harán otra autopsia a la Veneno
Le harán otra autopsia a la Venenolarazon

No convencidos con los resultados previos, su familia está recaudando dinero para realizarla.

Se ha cumplido un mes de su traspiés mortal, confirmado tras dos autopsias, según me contó Valeria, mi vecina y biógrafa de la extinta. Amplió la información antes del estreno de «El amor sigue en el aire», donde Alaska y Mario completan un póker perfecto con Bibi y la apostura física de Manuel Bandera. Ellos la estrenaron hace un año y ahora la han ampliado con nuevas escenas para la pareja, que acaban vestidos de novios y exaltando el «¡Vivo cantando!» que hizo triunfar a Salomé en la Eurovisión de 1969, donde Pertegaz la vistió con un mono de pedrería turquesa para el que perdió ocho kilos, sobre todo de caderas y trasero. Asistí a todas las pruebas porque el certamen lo fraguaban Artur Kaps y Franz Johan desde Miramar.

Retomo el tema mortuorio: «¿Ya habéis enterrado a La Veneno?», pregunté a quien fue su última amiga. «Todavía no», me dice. «¿A qué esperáis?», insisto. «Su familia, que nunca se preocupó, quiere una tercera autopsia, ya que están disconformes con las ya realizadas, que dieron el mismo pronóstico de caída doméstica. No se lo creen y, como vale mucho, esperan recaudar el dinero para realizarla. Mantener el cadáver en el tanatorio cuesta mas de doscientos euros diarios. No sé cómo los pagarán», asegura.

Paso página. Me enfrasco en el abarrotado cine-teatro Coliseum, marco de «El amor sigue en el aire». Es un repaso a grandes temas, desde el «Parole, parole» a «Somos novios». La música reemplaza los diálogos, que son pocos y sabrosos, aumentados por la gracia de Fernández, que aquí recupera a la Bibi que la catapultó al éxito desde el Starlets. Era una atracción turística como la Plaza de Cataluña, las fuentes luminosas o el Museo Picasso. Cuantos llegaban a Barcelona acababan allí para asombrarse con sus dotes. La recibió una ovación estruendosa de rendidos fans que iban desde Joaquín Prat a Patricia Pérez, pasando por un Paco Clavel mucho más delgado. Alaska se alza, como suele hacer, sobre stilettos casi fosforescentes. Van del dorado al rojo terminando con otros de blanco ilusión, como el velo de novia que cubre su cabeza. Un auténtico «happy ending» en sostenido duelo musical tal si fueran Valderrama y Dolores Abril. La Jurado sirve de multitema, desde el «Como yo te amo» contestado con el despreciativo «Es un gran necio, un estúpido engreído». Emociona el «Se me olvidó que te olvidé» de la negraza Guillot, contrapunteado graciosamente por el «Yo no soy esa que tú te imaginas». Un repaso irónico a una época presente en todos. No se lo pierdan.