Francisco Salado: «La guerra por el tuit de más impacto no es una política seria para el contribuyente»

“Hace 10 años si alguien hubiera dicho que Málaga tendría un paseo peatonal que conectara la provincia, lo habrían tildado de loco”, señala el presidente de la Diputación malagueña. “Cuando se habla de que Málaga tiene que mirar más al mar, hablamos de la Senda Azul”, indica

¿Cuáles son los objetivos del mandato?

La Diputación de Málaga se ha consolidado como el Gobierno de la provincia, capaz de liderar grandes proyectos de interés general, como el Caminito del Rey, la Senda Litoral o Sabor a Málaga, y también como la institución más cercana a los ayuntamientos, a los problemas de los vecinos de los 103 municipios que la conforman. Hemos invertido más de 500 millones en el último mandato, cifra récord. El objetivo es batir los niveles de inversión, seguir siendo cercanos y muy útiles a los malagueños.

Esta legislatura en la que el PP revalida Presidencia no gobierna en solitario, sino con Cs. ¿Cómo son las relaciones?

Excelentes y cordiales. Tenemos la confianza necesaria e imprescindible para que el Gobierno provincial funcione como un reloj. Ya tenemos una experiencia anterior, el mandato pasado, aunque no gobernamos con Cs, sí recibimos su apoyo en la investidura, en los presupuestos y en los grandes asuntos de la institución.

¿Han encontrado hasta el momento alguna discrepancia a sus planteamientos?

No, desde el primer momento la relación con el vicepresidente primero, Juan Carlos Maldonado, es muy fluida y bidireccional.

¿En qué proyectos «ambiciosos» trabaja la institución?

Tenemos en marcha muchas iniciativas transformadoras de la provincia. La más inminente quizás sea abrir un nuevo centro cultural y de convenciones en la recién reformada Plaza de Toros de La Malagueta. Va a sorprender. Vamos a terminar la Senda Litoral y a la vez vamos a crear la Senda Azul, que va a poner en valor todo el patrimonio natural y arqueológico que tenemos bajo el mar, potenciar el mar como un atractivo turístico, deportivo y cultural más. Cuando se habla de que Málaga tiene que mirar más al mar, hablamos de la Senda Azul. El mar de Alborán sigue siendo aun gran desconocido para muchos malagueños y para muchos de nuestros visitantes. Es otra oportunidad de crear actividad, riqueza y empleo. Y protegiendo el medio ambiente.

¿Cómo se encuentra la ampliación del Caminito del Rey?

Hemos mantenido reuniones con la Consejería de Medio Ambiente y los técnicos de las dos administraciones están valorando su viabilidad ambiental, el impacto y la idoneidad.

¿Concluirá en este mandato la Senda Litoral?

Sí, ese es nuestro objetivo. Hace diez años, si alguien hubiera dicho que Málaga tendría un paseo marítimo peatonal que conectara los dos extremos de la provincia, lo habrían tildado de loco. Hoy, gracias a la visión de la Diputación de Málaga y a la alianza con todos los alcaldes de la costa, estamos muy cerca de que el proyecto sea una realidad, casi al 90% terminado.

¿Qué medidas se están impulsando para combatir la despoblación en el interior de la provincia?

Vamos a desarrollar, con los ayuntamientos, el resto de administraciones y muchas entidades, como la Universidad, las entidades financieras o muchas ONG, un plan estratégico que marque la pauta a seguir. Pero venimos desarrollando muchas actuaciones, como el plan cheque bebé, del que se han beneficiado ya 1.400 familias con hijos nacidos o adoptados en municipios menores de 5.000 habitantes. O el plan de Turismo Senior, por el que 2.500 mayores de los pueblos pequeños están disfrutando, algunos por primera vez, de tres días de vacaciones en un hotel de la costa o de algún destino cultural de la provincia. Se trata, además, de una medida que nos sirve para luchar contra la estacionalidad turística. Es un plan pionero, como el Primera Oportunidad, para lograr trabajo a licenciados en empresas, preferentemente de los pueblos menores, o el plan para estimular la contratación de parados de larga duración, que también prima a los pueblos más pequeños. Prácticamente todo lo que hace la Diputación da prioridad a los pueblos de menos de 20.000 habitantes, los más afectados por la despoblación. Y no se nos puede olvidar que actuaciones como Sabor a Málaga, que ha impulsado nuestra industria agroalimentaria, o toda la apuesta por el turismo interior, que está superando cada año el millón de visitantes con iniciativas como el Caminito del Rey o la Gran Senda, son fundamentales para crear actividad y empleo en el entorno rural.

Se quejan algunos municipios del mal estado de carreteras del interior de la provincia.

Estamos invirtiendo unos 10 millones al año en su mantenimiento, pero queremos ser más ambiciosos y para eso hemos diseñado el plan Vía-ble, para mejorar las conexiones y acortar tiempos de desplazamiento. Es parte de nuestra estrategia de lucha contra la despoblación. Si en los pueblos pequeños las comunicaciones son fáciles, ¿dónde se va a vivir mejor? Supondrá una inversión superior a los 50 millones, y en algunos casos ahorrará casi una hora de coche a muchos vecinos que se desplazan a la costa o a los grandes municipios a trabajar.

Además de plantear una delegación de lucha contra el cambio climático, ¿qué se está haciendo?

Nuestro Plan Málaga Viva contiene muchísimas acciones, principalmente la plantación de árboles y reforestación de zonas degradadas. Llevamos más de 300.000 árboles plantados y esperamos superar el millón este mandato. Estamos acometiendo con todos los ayuntamientos numerosas actuaciones de eficiencia energética, para reducir su consumo de electricidad y lograr un ahorro económico y bajar su huella de carbono y las emisiones. Queremos, aunque no sea nuestra competencia, liderar una revolución del transporte público en la provincia, que ayude a quitar muchos coches privados de la carretera y resulte más beneficiosa para el bolsillo de los malagueños.

¿Qué cree va a ocurrir el 10-N?

El PP ha demostrado que tiene candidato y proyecto, serio y solvente. Y creo que los ciudadanos se han dado cuenta de que necesitamos volver a la estabilidad, a la seriedad y a la responsabilidad, cosa que con Pedro Sánchez es imposible.

¿Le preocupa la desafección respecto de la política?

Mucho. No obstante, reconozco que en algunos casos está más que merecida. Si queremos recuperar esa confianza tenemos que recuperar primero la seriedad, el sentido de Estado y la responsabilidad. Estamos en la guerra diaria por un titular del informativo, por ver quién pone el tuit de más impacto. Esa no es forma de hacer política seria al servicio de los contribuyentes.

Críticas al «bloqueo partidista»

Salado señala que la relación con la Junta es «inmejorable», abordando proyectos varados 30 años, y ofrece su colaboración para el tercer hospital. Con el Gobierno central, apela a la «lealtad institucional». Salado critica «el bloqueo de la financiación decidido de forma partidista»