Blanqueo de capitales

Un técnico local esgrime presiones para firmar obras con Fergocon

Argumenta que llegaron a falsificar en ocasiones su firma

La Audiencia de Málaga enjuicia de nuevo a Del Nido y a Julián Muñoz
La Audiencia de Málaga enjuicia de nuevo a Del Nido y a Julián Muñozlarazon

Un técnico municipal de obras procesado en el «caso Fergocon», que ha llevado al banquillo de acusados al abogado José María del Nido, aseguró ayer durante el juicio que recibió presiones desde el Ayuntamiento para firmar obras en Marbella.

Durante su declaración, solo contestó a las preguntas de su abogado defensor, y aseguró que «nunca, jamás» firmó obras de Fergocon, empresa vinculada a dos hermanos de Del Nido, y que están también sentados en el banquillo de los acusados.

Este técnico insistió en que nunca sucumbió a presiones y que éstas venían directamente desde la gerencia de la empresa y del Ayuntamiento, aunque no concretó por parte de quien.

Pese a ello, al finalizar su declaración el magistrado presidente, Pedro Molero, le preguntó al respecto y señaló al ex alcalde Julián Muñoz, que llegó a decirle que se dejara de tonterías y que firmara, pero que él no firmó y se fue.

En otra ocasión fue llamado al despacho del ex asesor Juan Antonio Roca, en prisión por otros procedimientos, y que también estaba presente la ex alcaldesa de Marbella Marisol Yagüe y un empresario, entre otros. Durante la reunión explicó que Roca le amenazó para que firmara unas facturas de unas obras de galerías comerciales del empresario que estaba presente, pero que él se negó. E indicó que recibió llamadas telefónicas complicadas para presionarlo, pero que no entró «en ese juego» y que cuando «intuyó» ciertas cosas, presentó su renuncia ante Julián Muñoz en 2002 «quemado y asfixiado por la situación».

El técnico, acusado de malversación y falsedad y que se enfrenta a ocho años de prisión y quince de inhabilitación, relató que cuando comenzaron los problemas económicos en el Ayuntamiento no se pagaba nada. A pesar de ello, el procesado dijo que los técnicos recibían presiones para firmar obras y facturas de determinadas empresas porque había «contratas de primera y de segunda». Entre las empresas «de primera» estaba Fergocon y que a dichas empresas siempre se les pagaba, pero las «de segunda» tenían problemas para cobrar.

El acusado subrayó que en 2008 presentó una denuncia por falsedad de su firma en ciertos papeles y que «por desgracia» su rúbrica es muy fácil de falsificar, por lo que cree que fue falsificada en algunas ocasiones. Además, dijo que en Marbella había «un ambiente de miedo general».