Fotografía

La mirada nipona

La Fundación Mapfre dedica una exposición a Shomei Tomatsu

La muestra permite recorrer todos aquellos temas que interesaron a Shomei Tomatsu a lo largo de su carrera, un recorrido que ahora ocupa las salas de la Casa Garriga Nogués, dentro de la programación de la Fundación Mapfre / Shomei Tomatsu
La muestra permite recorrer todos aquellos temas que interesaron a Shomei Tomatsu a lo largo de su carrera, un recorrido que ahora ocupa las salas de la Casa Garriga Nogués, dentro de la programación de la Fundación Mapfre / Shomei Tomatsularazon

La Fundación Mapfre dedica una exposición a Shomei Tomatsu

La fundación Mapfre sigue descubiéndonos en Barcelona a algunos de lños grandes nombres de la fotografía, autores que hasta la fecha no habían sido objeto de una exposición destacada en la ciudad. En esta línea, desde esta semana le toca el turno a uno de los grandes maestros japoneses: Shomei Tomatsu.

El artista nipón inició su carrera tras el final de la guerra mundial que tan funestas consecuencias había llevado hasta su país. La técnica la conocía gracias a la labor de sus dos hermanos ante la cámara, además de disponer de una improvisada sala oscura para revelado y que era un armario. Hablamos de un momento en el que Japón está intentando levantarse de las ruinas provocadas por dos bombas atómicas.

Tomatsu arranca su carrera fotográfica a los veinte años y lo hace con un estilo surrealista que es objeto de críticas por parte de su profesor. Por ese motivo, el fotógrafo decide tomar el camino del realismo, convirtiéndose en uno de los mejores fotoperiodistas del momento, una serie de reportajes que aparecerán en algunas publicaciones de su país.

Tomatsu se mueve solo, con un estilo propio, haciendo del blanco y negro el principal vehículo para su labor, aunque también trabaja en color. Uno mención especial la merece su serie fotográfica dedicada a Nagasaki, donde retrata a los supervivientes de la bomba nuclear de 1945, todo ello realizado con un grandísimo respeto hacia las víctimas con las que mantuvo contacto. También recogió los efectos del bombardeo a través de objetos cotidianos, como un reloj parado a la hora del ataque o una botella deformada por la explosión.

Estas fotografías no fueron las únicas con las que el artista retrató el Japón de posguerra, que él conoció siendo joven, ya que nació en 1930 y falleció en 2012.

La miseria de la población en aquella época quedó reflejada en las fotografías que se muestran en las primeras salas de la exposición, «que no se recrean en el feísmo de la pobreza, sino que busca siempre la belleza que cohabita en ella», según el comisario Juan Vicente Aliaga.

La muestra –estructurada a partir de los principales temas que interesaron a Tomatsu a lo largo de su carrera– también reúne una serie de fotografías realizadas en Afganistán y otras en los Mares del Sur, donde retrató la naturaleza, el mar y los animales.

Dónde: Teatro Barceló. Calle Barceló, 11. Madrid.

Cuándo: del 20 al 2 de octubre.

Cuánto: entrada de día, 18 euros. Abono, 28.