Iñaki Zaragüeta

GREZZI Y EL GERENTE ACORRALADOS

Conforme vamos conociendo los entresijos, aparecen nuevas circunstancias nada atenuantes para los implicados, emergen las sospechas

La Razón
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Conforme vamos conociendo los entresijos, aparecen nuevas circunstancias nada atenuantes para los implicados, emergen las sospechas

La estafa, desfalco, robo o como se le quiera llamar de los 4,3 millones de euros en la Empresa Municipal de Transportes de Valencia está dando mucho que hablar y, según mi amigo Rogelio, todavía dará para más. Conforme vamos conociendo los entresijos, aparecen nuevas circunstancias nada atenuantes para los implicados, emergen las sospechas.

Una, el gerente, al que Grezzi propició aumentar sueldo de 5.000 euros anuales después de haberse destapado este vergonzoso incidente, provenía de empresa «Viajes Transvia», a la que Grezzi va prorrogando el contrato del «Bus Turistic» y conocida por el escándalo de los relojes regalados al exvicealcalde Grau.

Dos, por la declaración jurada de la empleada de la EMT despedida -la única que ha pagado los platos rotos- hemos sabido que el gerente llevaba trabajando -no se encontraba de vacaciones- varios días antes de que la Caixa destapara la estafa, desfalco, robo o como se le quiera llamar.

Tres, otra vez interviene mi amigo Rogelio, que está empeñado en afirmar la existencia de más casualidades internas en toda ese presuntamente affaire delictivo, que serán expuestas en su momento por los investigadores.

En cualquier caso e independientemente de las responsabilidades penales que puedan derivarse por parte de los Tribunales, hay responsabilidades políticas que implican directamente al edil Giusseppe Grezzi y al gerente, responsabilidades que se niegan a asumir mediante la única vía digna, la dimisión. Así es la vida.