Iñaki Zaragüeta

La unidad no se nota en el PPCV

La Razón
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Demasiados acontecimientos han sucedido durante los últimos días en el PP nacional y de la Comunitat Valenciana. Desde el error de que una buena parte del aparato regional se pusiera tan descaradamente, como hizo el de la calle Génova de Madrid, a favor de Soraya Sáenz de Santamaría, hasta la cena exhibicionista de los «pablistas» celebrada anoche en Valencia, pasando por el cargo relevante concedido en la Ejecutiva nacional a Vicente Betoret como sonoro revés a Isabel Bonig, Eva Ortiz y demás.

Con estas sensaciones y por lo que se refiere a la a la Comunitat, extraña comprobar cómo algunas actuaciones diseñan un escenario muy lejano al mensaje de unidad que el flamante presidente popular, Pablo Casado, se empeña en proclamar desde su elección.

De ahí que leyera, y sigo leyendo y escuchando estupefacto declaraciones desde la dirección valenciana con tintes de enfrentamiento a Madrid con la excusa de reivindicar que las listas electorales se confeccionarán por la Dirección regional o mediante acuerdo con ella. No parece la forma más oportuna de afrontar los retos futuros.

De la otra parte tampoco se quedan cortos. Los denominados «pablistas» no han perdido un minuto para celebrar con aparatosidad un cónclave exhibiendo músculo y mostrando pectorales por la victoria como si de una advertencia se tratara sobre quién manda a partir de ahora.

Con estos modos, vislumbro nubarrones. Así es la vida.