Política

Ayuntamiento de Madrid

Carmena suspende en gestión deportiva

Los usuarios de los centros deportivos municipales bajan la nota a la regidora, que no ha logrado remontar la valoración desde 2015

El consistorio madrileño resolvió la concesión del polideportivo Fuente del Berro después de varios conflictos con la concesionaria / Foto: Alberto R. Roldán
El consistorio madrileño resolvió la concesión del polideportivo Fuente del Berro después de varios conflictos con la concesionaria / Foto: Alberto R. Roldánlarazon

Los usuarios de los centros deportivos municipales bajan la nota a la regidora, que no ha logrado remontar la valoración desde 2015.

Uno de los puntos negros de la gestión de Manuela Carmena al frente del Ayuntamiento de Madrid ha sido la que concierne a los centros deportivos municipales. Durante la legislatura ha habido todo tipo de polémicas por el estado de conservación y mantenimiento de los polideportivos –que obligaron incluso a aplazar un partido de la Superliga de voleibol femenino por las goteras en Entrevías–, la fallida remunicipalización que ha llevado al cierre de algunos centros concesionados, o los enfrentamientos que, a nivel de distrito, se están sucediendo por la renovación de las direcciones de los polideportivos. Todo ello se ha traducido en una profunda insatisfacción por parte de los usuarios que han dejado, por un lado, de acudir a las instalaciones municipales y, por el otro, ha dejado reflejadas sus quejas en la encuesta que el consistorio madrileño realiza a los que acuden a los polideportivos y piscinas del Ayuntamiento.

Así, tan sólo las piscinas municipales han perdido 5.000 usuarios al día pese a la reducción de tarifas y ampliación de días de apertura que realizó el pasado verano la alcaldesa. Además, en la última encuesta de satisfacción para los usuarios de los centros deportivos del Ayuntamiento de Madrid se consolida la bajada de un 10% en la valoración durante toda la legislatura, reduciéndose en un 50% los polideportivos que superan una nota de 8 respecto a la pasada legislatura.

En concreto, al finalizar el mandato de la anterior regidora, Ana Botella, había ocho centros deportivos municipales que superaban el 8 en la encuesta de satisfacción: Vallehermoso, Moratalaz, Antonio Díaz Miguel, Fuente del Berro, Pepu Hernández, Cerro Almodóvar, Moscardó y Chamartín. Ahora, tan sólo Vallehermoso y Moscardó continúan con buenas notas, más Alcántara y Barceló, de gestión indirecta. Al margen de estos cuatro, la valoración de los usuarios de los centros deportivos a caído de forma constante desde 2015 una media de 0,5 puntos, aunque hay bajadas más acusadas. Por ejemplo, es muy llamativo el caso del de Aluche, que ha pasado de tener una valoración del 7,3 al 5,8, o el Francisco Fernández Ochoa, que ha pasado del 7,7 al 6,4; y el de Antonio Díaz Miguel, que ha bajado de un 8,38 al 7,1 según sus usuarios. También son acusadas las bajadas del de Moratalaz, que ha pasado del 8,4 al 7,7 y en el Luis Aragonés, donde la nota cae del 8,2 al 7,7.

Con todo, el equipo de Carmena ha logrado una pequeña remontada en la valoración general, puesto que ha subido de un 7,17 a una medias en la encuesta 2018-2019 del 7,46. Sin embargo, en ningún momento de la legislatura ha llegado a superar la media del último año de Botella que fue de un 7,6, llegando hasta el 7,66 en la valoración general de los aspectos de los centros deportivos según la misma encuesta.

Igualmente, el grado de satisfacción general de los usuarios de los polideportivos madrileños ha mejorado respecto a la encuesta de 2017-2018, cuando era de un 61,7%, siendo ahora de un 69,2%. Aún así queda lejos del 79,05% de grado de satisfacción de la encuesta 2014-2015. Además, pese a la mejora en las calificaciones, el grado de insatisfacción de los usuarios continúa siendo muy elevado, con un 8,5% frente al 2,6% de la última encuesta de la anterior legislatura.

Dentro de los detalles concretos, los usuarios penalizan la gestión de Carmena en cuanto a las clases 85,1%, frente al 92,5% de 2014/2015, así como la masificación, un 62,2% frente a un 82%, aunque en este punto hay que tener en cuenta que varios polideportivos han estado cerrados por reformas y otros motivos, llegando a haber hasta una decena de piscinas cerradas. También bajan la nota, aunque menos, en cuanto a los horarios de estas clases 7,3 frente a 7,91, y la limpieza e higiene, 6,8 frente a 7,05. Del mismo modo, si bien la regidora madrileña ha logrado mejorar durante la legislatura los índices en las clases y profesorados, llegando al 8 en casi todos los aspectos, no ha superado las notas de la anterior legislatura. Sí ha logrado, gracias a la reducción de las tarifas, una mejor valoración en este aspecto, superando en la última encuesta con un 7,9 frente al 7,2 de 2014-2015.

Al respecto, la concejal del grupo popular, Carmen Castell, apuntó a que «suben los impuestos, bajan los precios, y a pesar de eso empeoran el servicio deportivo municipal con más usuarios insatisfechos». Para la edil del PP, «Carmena lo único que ha hecho en cuatro años es dejar un servicio municipal empobrecido».