Motor

Un espectacular Ferrari F50 busca propietario, ¿qué precio alcanzará?

Su precio comienza en más de 2,8 millones de euros para el legendario V12 de los años 90 del que se fabricaron sólo 349 unidades.

Ferrari F50
Ferrari F50FerrariFerrari F50

El mundo de la Fórmula 1 pertenece por derecho propio al ADN de Ferrari, pero sólo hace relativamente poco tiempo que la tecnología de los monoplazas ha llegado a la forma del Cavallino Rampante. Un encuentro entre dos mundos que ha dado lugar a modelos históricos e icónicos, y entre sus mejores exponentes el Ferrari F50, un coche de carreras creado en 1995 para celebrar el 50 aniversario del nacimiento de la compañía.

Era el heredero directo del también legendario F40, del que, sin embargo, difería considerablemente tanto en estilo como -sobre todo- en mecánica. Era una barchetta extrema (el techo se podía quitar) que renunciaba al motor turboalimentado de su antecesor para abrazar un V12 aspirado derivado del monoplaza de 1990.

Un trasplante que dio vida a uno de los coches más deseados del planeta, del que sólo se produjeron 349 ejemplares (en deferencia a la filosofía de Drake “Ferrari siempre hará un coche menos de lo que el mercado demande”) y que ahora está listo para ser la estrella de una subasta de RM Sotheby’s.

Vestido ordinario

La librea Strictly Rosso Corsa (la más popular, con 302 unidades producidas) cubre las formas diseñadas por Pininfarina y el V12 de 4,7 litros y 5 válvulas (65°) capaz de entregar 520 CV y 471 Nm de par, respectivamente, a 8.500 y 6.500 rpm.

Situado justo delante del eje trasero, tenía la misión de mover sólo 1.230 kg, gracias a un uso masivo de materiales ligeros como la fibra de carbono para la bañera, llevando al Ferrari F50 a rozar los 325 km/h durante los 3,8 segundos que necesita para pasar de 0 a 100 km/h. Y sí, la caja de cambios era manual.

Especificaciones de EE. UU.

El Ferrari F50 que se subasta el 22 de mayo (chasis 103922) es uno de los 55 ensamblados según las especificaciones estadounidenses y fue vendido en diciembre de 1995 a Benny Caiola, su primer propietario. En 15 años, el coleccionista, que falleció en 2010, recorrió algo menos de 6.500 km antes de acabar -en 2011- en manos de un coleccionista tejano, recorriendo algo más de 1.500 km.

Un kilometraje muy bajo que no disuadió a su propietario de someterlo, en 2018, a un meticuloso mantenimiento del motor, reformado y ahora listo para “cantar” por encima del muro de las 8.000 rpm. La base de la subasta está fijada en unos 2,8 millones de euros, incluyendo los manuales originales, las facturas de los distintos trabajos realizados, el kit de herramientas, el techo rígido y el equipaje a medida.