Movilidad

¿Qué harías si tuvieras mil millones de dólares? Atentos a la inversión del ex actor Brock Pierce

Su éxito como artista fue efímero, pero ha sabido reinventarse: se ha convertido en un experto en bitcoin y ahora ha decidido convertir un antiguo yate en un hotel de lujo.

Brock Pierce
Brock PierceBrock PierceBrock Pierce

Un yate con historia y un milmillonario que decide restaurarlo. Una combinación de la que solo puede surgir una auténtica obra maestra.

En este caso, la embarcación es conocida como MV Funchal, fue construida en 1961 y durante la década de los 60 era propiedad del dictador portugués António de Oliveira Salazar, que lo utilizaba para algún que otro viaje. Tras su muerte en 1970 y una consecuente transición política en el país vecino, el MV Funchal fue el que trasladó las cenizas de Pedro I de Brasil, clave para la independencia carioca, a Sudamérica.

Brock Pierce, en The Mighty Ducks
Brock Pierce, en The Mighty DucksDisneyBrock Pierce, en The Mighty Ducks

Hablamos, sin duda, de un yate único y que hasta hace poco se estaba consumiendo en un depósito de chatarra portugués. Un día, Brock Pierce -el milmillonario de nuestra historia-, antiguo “niño prodigio” de la interpretación que ha protagonizado varias películas de Disney, se enteró de la situación del crucero, se encaprichó con él y decidió comprarlo por casi dos millones de dólares para transformarlo en un hotel y museo de lujo flotante.

MV Funchal
MV FunchalMV FunchalMV Funchal

La carrera como actor de Pierce fue efímera. Entonces, os preguntaréis: ¿cómo una persona que solo triunfó de pequeña en el cine puede gastarse ese dinero en un yate antiguo? La respuesta es que todavía le sobran 998 millones de dólares en la cuenta. El estadounidense es el perfecto ejemplo visión y reinvención, y lo que lo ha hecho ser una de las personas más ricas del mundo ha sido algo sobre lo que hemos hablado varias veces en estas páginas: el mundo del bitcoin.

Imaginaréis que, para él, la compra del MV Funchal supone una nimiedad. Con todo ello, tras el visto bueno del gobierno portugués, Pierce ya tiene a un total de 180 personas trabajando en él y se ha gastado por ahora algo más de seis millones de dólares en su restauración. Está previsto que este hotel de lujo flotante permanezca atracado en Lisboa, por lo que los amantes de la exclusividad ya tienen nuevo destino para cuando finalicen las obras.