Compromiso

Ayuso resarcirá a la hostelería y el comercio madrileños por el cierre adelantado

Se reunirá la semana próxima con estos sectores para estudiar la forma de recuperar el adelanto del toque de queda

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, toma la palabra en presencia del vicepresidente, Ignacio Aguado, durante la sesión plenaria extraordinaria de la Asamblea de Madrid
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, toma la palabra en presencia del vicepresidente, Ignacio Aguado, durante la sesión plenaria extraordinaria de la Asamblea de MadridJuan Carlos HidalgoEFE

La semana que viene la hostelería madrileña tiene una cita con la presidenta madrileña. Isabel Díaz Ayuso ha avanzado que se reunirá con los sectores de la hostelería, el comercio y la restauración para ver la forma de recuperar las dos horas del cierre adelantado, en esos establecimientos, por el toque de queda. “Lideraremos juntos la recuperación de las dos horas perdidas”, afirmó.

Unas palabras, pronunciadas en sede parlamentaria, en la Asamblea de Madrid, que muestran el compromiso de la Comunidad con unos sectores clave de la economía de la región.

Desde la Comunidad de Madrid se ha insistido en la peligrosidad y el contagio de la cepa británica, algo que ha impactado en la hostelería madrileña de manera grave.

En este sentido, la Plataforma por el Ocio de Madrid reclama por su parte al Ayuntamiento de Madrid que agilice las gestiones administrativas para desbloquear el problema burocrático del Distrito Centro tras siete meses esperando la resolución de los expedientes y medidas contra el impacto del coronavirus.

La Plataforma pide este jueves en una nota de prensa “agilizar al máximo” las gestiones en la Junta Municipal del Distrito Centro para tramitar “la concesión o ampliación de terrazas, expedientes de peatonalización” y otras medidas “claves para la supervivencia de las pymes”.

También subrayan que hay resoluciones sobre terrazas que están aprobadas y “aún no se han comunicado formalmente” a los titulares de los negocios, algo que provoca “inseguridad jurídica”.