Estos son los cinco miradores en los que podrá ver Madrid desde el cielo

Madrid es una ciudad que sorprende e impresiona solo abarcable cuando se divisa desde lo alto. Si quiere ver Madrid a vista de pájaro, no tiene más que acudir a algunos puntos estratégicos de la ciudad para contemplar toda su belleza y cumplir con aquello que se dice de Madrid al cielo.

Parque de las siete tetas o Mirador del Cerro del Tío Pío

Se encuentra en el sureste de la ciudad en la calle calle Benjamín Palencia, en la zona de Vallecas. Este conjunto de siete colinas permite por su altura y posición disfrutar de una magnífica panorámica. Aquí se pueden ver uno de los mejores atardeceres de Madrid.

Desde este lugar Antonio López pintó el cuadro “Madrid desde Vallecas”, que se encuentra en la Asamblea de Madrid. Este sugerente mirador fue el primer gran núcleo chabolista. Su promotor fue Pío Felipe Fernández que se construyó una casa modesta, pero con cuatro habitaciones y un establo, en el que guardaba el carro y las mulas que empleaba en la recogida de chatarra y basuras. El negocio le permitió comprar terrenos en la zona, que más tarde alquilaba o vendía para que cada cual se construyera su chabola bajo su propia responsabilidad, ya que carecían de licencia de construcción. Eran terrenos no urbanizables.

En 1958, el Opus Dei construía en el Cerro el colegio Tajamar, inaugurado cuatro años después, y en 1965, en un modesto barracón, la iglesia parroquial de San Alberto Magno. El cantante extremeño Luis Pastor vivió en el barrio y ha sido escenario para el rodaje de varias series de televisión «Física o química», «Fuga de cerebros» «Aida», «Vive cantando» o «Estoy vivo».

En 2014, Pablo Iglesias, vecino de la zona, registraba el partido Podemos, en el Cerro del Tío Pío.

Mirador de la Huerta de la Partida

Situado en el Paseo del Embarcadero, 3, se halla en un espacio natural de 38.000 metros cuadrados junto al río Manzanares. En la parte más alta de la Huerta de la Partida se ha instalado un mirador desde el que se divisa el arbolado y el trazado de la Huerta. Desde él se puede visitar el Palacio Real, además de la catedral de la Almudena e incluso el Museo de las Colecciones Reales. A la izquierda puede verse la Torre de Madrid y el Edificio España.

Mirador del Palacio de Cibeles

Si se encuentra en el centro de Madrid, en el entorno de Cibeles, no dude en visitar uno de los miradores más bonitos de Madrid. Su altura, superior a la de los edificios que le rodean, permite una amplia panorámica del entorno. Se encuentra en la planta octava del Palacio de Cibeles y su ubicación es inmejorable.

Para subir es necesario sacar una entrada en la taquilla que se encuentra en el vestíbulo principal. Es preciso también pasar por un control de seguridad. El precio de la entrada es de 3 euros. Existe una tarifa reducida a 2,40€ para desempleados; 2,25€ para niños hasta 14 años y mayores de 65; 1,50€ para personas con discapacidad; y 1€ para menores de 2 años. Conviene consultar tanto los precios como los horarios actualizados en la página web de CentroCentro.

Faro de Moncloa

El Faro de Moncloa se sitúa en el corazón de Ciudad Universitaria y ofrece una perspectiva de Madrid a 110 metros de altura. Se inauguró en 1992 con motivo de la Capitalidad Cultural Europea de Madrid como torre de comunicaciones e iluminación. Subir es toda una experiencia para disfrutar de la capital a través de las amplias cristaleras. Ofrece una vista panorámica de la ciudad donde, además del casco urbano, se puede contemplar al fondo la sierra madrileña. Para acceder a este mirador, hay que pagar una entrada general de 3€.

Dalieda de San Francisco

Al parque de San Francisco, situado en la Gran Vía de San Francisco, 29, se le llama también “Dalieda” al tratarse de un jardín botánico especializado en dalias (ahora hay rosas) y dispone de una valla al fondo que hace de mirador hacia el oeste de la ciudad.

Es un bonito lugar para contemplar la puesta de Sol. Junto a la valla, encontramos representado en un grupo escultórico a San Isidro durmiendo. La pieza fue realizada por Santiago Costa y se llama, por si quedaba alguna duda, ‘El Sueño de San Isidro’. Se encuentra junto a la Basílica de San Francisco el Grande.