Concierto

Mendoza o el arte de convertir la literatura en música

La “boy band” de Rodrigo Domínguez presenta su nuevo disco, «¿Cuántos metros hay entre tú y yo?», en la Gran Vía de Madrid

Mendoza actúa en la sala Cadavra, en la calle del Caballero de Gracia, 10, de Madrid, el viernes 13 de enero a las 20:30
Mendoza actúa en la sala Cadavra, en la calle del Caballero de Gracia, 10, de Madrid, el viernes 13 de enero a las 20:30La Razón

Con sus palabras hila sentimientos que a todos nos han rozado alguna vez. A través de su melodía evoca acordes del «indie» más íntimo que combina lo romántico con lo canalla. Mendoza regresa a los escenarios madrileños para presentar su nuevo disco, «¿Cuántos metros hay entre tú y yo?», el primer «larga duración» de la «boy band» liderada por Rodrigo Domínguez.

Un disco que ha sido producido por el multipremiado músico jienense Pachi García Alís y que supone una delicia para los ávidos de un concierto de distancia corta y de un trabajo musical bien hecho y con mucho sentimiento. En junio de 2022, la banda sacó a la luz las nueve pistas de su segundo álbum y desde entonces no han dejado de viajar por toda España para presentarlos en pequeñas salas donde siempre han colgado el cartel de completo.

 

En este nuevo álbum se pueden escuchar los sonidos orgánicos que siempre han caracterizado a la banda y, en esta ocasión, a las guitarras acústica y eléctrica, se suman la trompeta, el órgano Hammond y el piano.

El álbum se grabó en Baeza, en el estudio Alisrecords, entre los meses de marzo de 2020 y noviembre de 2021. Con una pandemia de por medio, los Mendoza no han dejado de componer canciones de tintes románticos que, en realidad, esconden una crítica a los postulados, cada día más inhumanos, de una sociedad cada día más individualizada.

«Este disco está inspirado en canciones de Paolo Nutini, Carla Morrison, La Maravillosa Orquesta del Alcohol, Rayland Baxter, Rozalén, Xarim Aresté, Alex Ferreira o Richard Hawley. La música es inspiración para nosotros, pero no es la única. Nos guía la poesía de Juan Ramón Jiménez, Itziar Mínguez Arnáiz o Teresa Mateo, así como las novelas de Belén Gopegui, Cristina Morales y los ensayos de Jorge Dioni, Rebecca Solnit o César Rendueles. Al final, en la música de Mendoza se puede encontrar todo lo que nos conforma como personas: lo que escuchamos, lo que leemos y lo que vivimos», explica el vocalista, Rodrigo Domínguez.

Este viernes, él se subirá al escenario de la Sala Cadavra, en la Gran Vía de Madrid, junto a Bert Posada y Adrián Díaz-Caneja, a los que se unirán Guillermo Natividad a la batería y Miguel Rodríguez a los teclados.

Rodrigo Domínguez durante uno de los conciertos de Mendoza
Rodrigo Domínguez durante uno de los conciertos de MendozaLa Razón

«La música es nuestra terapia, nuestra motivación y, en definitiva, nuestra salvación. Hablo de la que componemos, pero sobre todo de la que escuchamos. Estoy eternamente agradecido a todos los artistas que han sido mi refugio gracias a sus canciones. Ellos han creado algo y yo he elegido que ese algo me acompañe en diferentes momentos de mi vida. Si lo piensas bien, es espectacular», asevera Domínguez.

Y es que, este artista madrileño, natural de Colmenar Viejo, lleva toda su vida subido al escenario, aunque su proyecto más personal, Mendoza, no surgió hasta 2017: «Nació de la necesidad de publicar canciones nuevas y también otras que llevo guardando en cajones durante los últimos 20 años». Desde el primer día que una guitarra española llegó a las manos de Rodrigo, este comenzó a componer sus propias canciones a pesar de tocar para otros artistas. En 2019 veía la luz su primer álbum, como él dice cargado de «música 100% masa madre». Así llegó el exitoso «Grieta de timidez», un EP que les llevó por todo el país. Pero, tras un inicio esperanzador, su trayectoria se vio en gran parte truncada por la pandemia.

«A Mendoza llegué para poder decir lo que quería decir y de la manera en la que quería hacerlo. Estamos aquí para disfrutar de la música y, humildemente, para poder expresar lo que no nos gusta del mundo en el que vivimos», subraya el cantante y compositor.

Y, por cierto, para quienes se pregunten el porqué del nombre elegido para esta banda de música masculino, no hay más que mirar en las estanterías de la casa familiar de Rodrigo: «Tenemos una buena bibliografía de Eduardo Mendoza. Sus historias rocambolescas han inspirado mi vida, así que ponerle su nombre al grupo me parecía un homenaje. Espero que no le moleste. Además, Mendoza es un nombre que sonaba contundente»

Domínguez también compatibiliza su liderazgo en Mendoza con las funciones como teclista y guitarrista en la multipremiada banda valenciana Novembre Elèctric, que ha obtenido igualmente un gran reconocimiento entre los críticos.