Asamblea

Abandono «sorpresa» de Monasterio y temor a la destrucción del partido en Madrid

Deja la política tras perder la confianza de Abascal y con críticas a la falta de democracia interna en Vox. «Ha sido un acto de servicio que he afrontado con sacrificio», dice la hasta ahora líder del partido en Madrid

La hasta hoy portavoz de VOX en la Asamblea, Rocío Monasterio, abandona la Asamblea de Madrid tras anunciar que deja su acta de diputada, a 10 de octubre de 2024, en Madrid (España). La vivienda y la financiación autonómica son dos de los temas principales del Pleno de la Asamblea de Madrid de hoy, que tendrá como telón de fondo el anuncio del PP el lunes de que llamará a la mujer del presidente, Begoña Gómez, a la primera sesión de la comisión que busca dilucidar si hubo trato de favor con e...
Rocío Monasterio, ayer, en los pasillos de la Cámara de Vallecas tras renunciar a su acta de diputadaCarlos LujánEuropa Press

Nadie de su grupo parlamentario pensaba que Rocío Monasterio estaba decidida a dejar la política ayer. De hecho, intervino en la sesión de control al Gobierno en el turno correspondiente a Vox para interpelar a la presidenta madrileña sobre «cómo puede ser que una vivienda se haya convertido en algo inalcanzable para los jóvenes, señora Ayuso». Poco después, en los canutazos que realizan de manera habitual los portavoces políticos, abrió una carpeta con un documento que se limitó a leer sin aceptar preguntas de los medios. Y ahí fue cuando soltó la noticia.

Después de ocho años al frente de Vox en Madrid, Rocío Monasterio anunciaba que abandonaba la política y volvía a la política un día después de ser destituida como presidenta del partido en Madrid.

Monasterio quiso que quedara constancia del momento y, en presencia de todos los medios, recorrió los pasillos de la Cámara hasta el registro, donde entregó su acta de diputada después de que el secretario general de Vox, a instancias de su presidente, Santiago Abascal, le comunicara que quedaba destituida como presidenta de la formación en Madrid, tras ocho años al frente. «El de Vox Madrid era el único comité ejecutivo provincial que quedaba en España votado y elegido por todos sus afiliados, el grupo más numeroso de Todo Vox», remarcó. Monasterio reconoció durante la lectura del documento que hizo público que el secretario general y el presidente del partido tienen la potestad de nombrar «a dedo» al siguiente comité ejecutivo en Madrid, cuya renovación tocaba en noviembre, «gracias a las sucesivas enmiendas de nuestros estatutos que dejan en el olvido esa democracia interna de los partidos que al principio habíamos venido todos a defender», sentenció. Con ello, la hasta ahora líder de la formación de Abascal en Madrid, se unía a otras voces críticas que señalaron la misma cuestión, como Macarena Olona, Sergio Rodríguez, Víctor Sánchez del Real, Rubén Manso o incluso su propio marido, Iván Espinosa de los Monteros.

«A la vista de que hoy no soy la persona de confianza del secretario general ni del presidente me parece lógico y honesto entregar mi acta de diputada», anunció.

Monasterio, arquitecta de profesión, quiso cerrar su etapa política dejando claro que «la política ha sido para mí un acto de servicio a España y a los españoles, que he afrontado como un sacrificio de mi comodidad personal, de horas con mis niños, de tiempo con mi familia, de renuncia a mi trabajo para intentar aportar algo a la sociedad y no como un puestecito del que vivir eternamente». Ahora vuelve a la actividad privada, «donde es probable que haga más vivienda que la señora Ayuso en cuatro años», dijo lanzando el último dardo a Ayuso. De hecho, detalló que no tendrá problema en volver a su empresa para seguir desarrollando su actividad como arquitecta «con la satisfacción de haber contribuido a los avances del partido desde su fundación, cuando las cosas eran difíciles y el espíritu de todos era limpio y cuando el partido destacaba por la solvencia de muchos de sus miembros», dijo en tono mordaz.

Monasterio no admitió preguntas y acabó dando las gracias a «tanta personas que contribuyeron con su esfuerzo de ofrecer a los españoles una alternativa política diferente, profesional y alejada de las peores políticas de los partidos de siempre» y a todo su equipo, votantes y afiliados a la par que puso en valor que Vox Madrid haya sido el único partido que ha podido presentar candidaturas en los 179 municipios de la Comunidad. «Servir ha sido un honor», ha concluido.

Ayer se supo que José Antonio Fúster, portavoz adjunto en la Asamblea de Madrid y portavoz nacional de Vox, ostentaría el puesto de la presidencia del partido, a la par que también el partido comunicó que Rocío Monasterio seguiría como portavoz en la Asamblea de Madrid porque «es necesario concentrar energías para soportar la mayoría arrasadora y destructiva del PP y eso requiere un liderazgo muy fuerte, como el de Rocío Monasterio, para aguantar la embestida de un partido que quiere destruir a Vox», manifestó Fúster a LA RAZÓN. Sin embargo, la noticia de la renuncia de la hasta ahora líder de Vox fue una sorpresa hasta para el recién nombrado presidente del partido en Madrid, que reconoció haberse enterado de la noticia en el mismo momento en el que Monasterio daba la noticia a los medios de comunicación.

Unas horas después comparecía ante los medios para dar el nombre de su sustituta y expresar su pesar por la marcha de Monasterio. «Me sorprende la decisión pero, sobre todo, me apena». «Todos los partidos renuevan los equipos mucho más que lo que lo hacemos nosotros», recalcó el nuevo presidente, quien también manifestó no compartir las críticas a las faltas de democracia interna en el partido a las que se refirió Monasterio en su intervención. «Las decisiones en un partido no son un ordeno y mando, son muy meditadas, muy habladas con todo el mundo».

Fúster ahondó en la idea de que «nuestra intención fue que siguiera como portavoz en el Grupo Parlamentario desarrollando la importantísima labor que ha hecho durante todos estos años con gran eficacia» a la vez que lamentó su interpretación sobre el porqué ha ocurrido su relevo. «Las cosas de los partidos son más sencillas, la vida de los partidos tiene ciertos ritmos y las interpretaciones que ha hecho Monasterio no puedo compartirlas. Eso no quita que haya una palabra de nosotros para con Rocío Monasterio: agradecimiento máximo por todo lo que ha hecho durante todos estos años y desearle la mejor de las suertes en su nueva vida”.

El líder de Vox, Santiago Abascal, también lamentó que Monasterio no vaya a cumplir con su «compromiso» con Madrid aunque admitió que «está en su derecho» de marcharse. Lo cierto es que ayer cundió la desolación entre diputados y colaboradores de Monasterio, algunos con ojos vidriosos. «Con esta noticia debe estar contento el PP, porque ahora el partido sí que está destruido», decían apesadumbrados.