Labor social
La Quinta Cocina de Madrid: integración y maestría a partes iguales
El Consistorio no solo asume el coste de los cursos, sino que ofrece a los participantes abono transporte, el vestuario necesario para el desarrollo de la actividad y las comidas que coinciden con sus horarios de clase
El delegado de Políticas Sociales, Familia e Igualdad, José Fernández, ha visitado La Quinta Cocina, el programa con el que el Ayuntamiento de Madrid promueve la formación e inserción sociolaboral de jóvenes en situación de vulnerabilidad en el ámbito de la restauración y que en el año 2023 recibió a más de 150 alumnos. Allí, ha participado en la clase magistral que el chef Víctor Comín ha impartido a los integrantes de la 18ª promoción, que comenzaron en junio la fase inicial de capacitación teórico-práctica.
Este proyecto, que el Consistorio desarrolla junto a la entidad Cesal en el Espacio Abierto Quinta de los Molinos, se enfoca en la formación de jóvenes de entre 16 y 23 años en riesgo de exclusión social como ayudantes de cocina y camareros, favoreciendo así su empleabilidad y acceso al mercado de trabajo.
Un antes y un después para cientos de jóvenes. Una puerta a las oportunidades laborales. El año pasado, formaron parte de esta iniciativa 154 personas, de las que 12 consiguieron un empleo antes de concluir la capacitación. Un total de 109 personas más acabaron el curso y de ellos, 54 obtuvieron una oferta de empleo al término. Estas cifras se traducen en una alta satisfacción por parte de los usuarios, que concedieron una nota de 9,4 sobre 10 a este recurso.
La Quinta Cocina ofrece dos servicios. Por un lado, el de formación ocupacional, con tres cursos anuales de seis meses de duración cada uno: cuatro de ellos de formación teórico-práctica a través de la escuela y de prácticas en restaurantes con los que se establece un convenio de colaboración. Por otro lado, los alumnos, tutorizados por profesionales, atienden la cafetería y restaurante del propio Espacio Abierto Quinta de los Molinos, un enclave cultural situado en este parque histórico de la ciudad. De esta forma, ponen en práctica los conocimientos adquiridos en clase.
Además de este completo programa formativo, los alumnos realizan actividades complementarias. Algunas en la propia escuela como la clase celebrada este domingo o monográficos y otras en el exterior como visitas a plantas de alimentación o excursiones. Asimismo, han recibido formación por parte de Policía Municipal, Bomberos y Samur.
A fin de facilitar su estancia y experiencia, el Ayuntamiento no solo asume el coste de los cursos, sino que ofrece a los participantes abono transporte, el vestuario necesario para el desarrollo de la actividad y las comidas que coinciden con sus horarios de clase.
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