Movilidad

Guía para comprar una moto de ocasión con todas las garantías posibles

La falta de unidades en algunas marcas y la crisis provocan que el mercado se incremente en un 25% en el último año

Guía para comprar una moto de ocasión con todas las garantías posibles
Guía para comprar una moto de ocasión con todas las garantías posiblesPiaggio Vespa

Este está siendo un muy buen año para los vehículos de dos ruedas no solo por su facilidad de circulación y aparcamiento en nuestras saturadas ciudades, sino por ser un medio de transporte mucho más asequible que los automóviles. Además del mercado de nuevas, se ha notado un importante incremento en las operaciones de motocicletas de segunda mano, que han tenido en los últimos meses un incremento espectacular.

De esta forma, el ahorro que supone el comprar este tipo de vehículos comparados con los coches, así como su mantenimiento y menor gasto en combustible están haciendo que las ventas se disparen. De hecho, por cada moto nueva que se matricula, se venden dos motos y media de segunda mano, según los datos del sector. Concretamente, el incremento de este mercado ha sido del 25% respecto a las cifras del año pasado. Hay muchos motivos para comprar una moto de segunda mano, pero según datos que maneja la aseguradora AMV, para el 51% de los españoles el precio es el principal argumento de compra, seguido en un 30% por la necesidad de tener el vehículo de manera inmediata, mientras muchas marcas no tienen unidades de motos nuevas por la crisis de los semiconductores.Y es que, la falta y el encarecimiento de las materias primas, componentes y chips electrónicos fundamentales para la fabricación de motos, están haciendo que aumenten los precios de los vehículos nuevos y se alarguen sus plazos de entrega, lo que provoca que la venta de ocho de cada diez motos de segunda mano.

En opinión de Jorge Moreno, director comercial de AMV, “el mercado de las motos de segunda mano está creciendo de forma imparable. La cantidad de ofertas que hay actualmente, la rapidez a la hora de conseguir una frente a la demora que hay con algunos modelos nuevos y especialmente, el precio más barato, ahora que los combustibles están por las nubes, y debido a la crisis económica que muchas personas están sufriendo, están haciendo que las ventas de este tipo de vehículos aumenten considerablemente comparado con años anteriores”. De esta forma, el precio ventajoso y la multitud de ofertas que hay en el mercado, además de la inmediatez de la entrega, son otros de los motivos de los españoles para hacerse con una moto de ocasión.

Pero sea cual sea la razón para compra una moto de segunda mano, hay que tener en cuenta una serie de aspectos para encontrar la moto que se adapta mejor a nuestras necesidades:

Qué moto elegir

El primero es saber qué buscamos. Debemos preguntarnos cuando vamos a comprar una moto de segunda mano cual va a ser su uso. No es lo mismo utilizarla para ir en carretera viajando constantemente, que para ir a trabajar o simplemente para hacer alguna escapada. No caigamos en la tentación de comprar una moto de mucha cilindrada que no vamos a necesitar y que nos va a penalizar en el seguro. Por ello, si la vamos a utilizar para todo tipo de desplazamientos y especialmente por ciudad, lo mejor será inclinarse por un scooter de hasta 250cc., con el que tendremos más que suficiente. Además, en lo que respecta al precio, siempre debemos de ser realistas y comprar solamente lo que nos podamos permitir.

Especificaciones

Después deberemos informarnos bien sobre las características, piezas de recambio, fiabilidad, problemas que suele tener, coste de mantenimiento, averías más frecuentes, etc del modelo que elijamos. Internet y los foros de la marca te pueden orientar en este aspecto. Respecto a la elección de donde adquirirla, vemos que para comprar una moto de segunda mano tenemos básicamente dos opciones: concesionarios y tiendas oficiales de compraventa de motos o el canal de los particulares, aunque actualmente han aparecido muchas aplicaciones de venta de motos, en su mayoría, no dejan de ser particulares que suben a estas plataformas sus ofertas. Buscar un vendedor con garantías, pero en muchas ocasiones, especialmente si se trata de particulares, esto es bastante difícil, al no tener referencias de ellos.

Particular o profesional

Si optamos por un particular tendremos la ventaja de que podremos negociar mejor un precio a la baja, pero deberemos solicitar probar la moto y hacerla revisar por un experto. En una tienda hay una mayor oferta y más garantía en caso de algún vicio oculto, aunque los precios sean más altos. En cualquier caso, hay una serie de preguntas clave tales como cuanto tiempo tiene, que otros dueños ha habido, kilometraje real, golpes o accidentes, etc… Aunque es conveniente comprobar en persona el estado real de la moto y no fiarse solo de las fotos que te puedan aportar. Observar detenidamente elementos como carenado, asiento, chasis, pantallas, óxido, neumáticos, luces, frenos... También habrá que revisar el número de kilómetros del vehículo, sin embargo, hay que tener cuidado ya que el tacómetro puede ser manipulado fácilmente. Y en caso de que estemos decididos, que un mecánico nos haga una revisión más profunda.

Atención a las motos que hayan estado mucho tiempo paradas, ya que es más fácil que haya que cambiarle piezas, neumáticos, gomas o manguitos. Pero si somos “manitas” o aficionados a la restauración, quizá se le pueda sacar un buen precio al vendedor por ella teniendo en cuenta el estado y la inversión posterior que se deberá hacer. Y es fundamental hacer una prueba del vehículo, circulando con ella y se recomienda que sea de día, para ver mejor posibles deterioros.

Documentación

Si por fin nos hemos decidido por una moto en concreto, es importantísimo asegurarnos de que tiene todos los papeles en regla y, si puede ser, pedir en una gestoría el informe de que tiene todos los pagos al día. De esta manera comprobaremos también que no se trata de una moto embargada y si está en orden de pago de todos los impuestos, identificación del titular, municipio donde está domiciliada la moto, kilometraje, número de titulares o posibles multas pendientes. También es importante que haya pasado, lo más recientemente posible, la ITV porque, además de ser una “garantía” de que debería funcionar correctamente, la ley no permite el cambio de titularidad si no se ha pasado.

Además, el vehículo deberá tener el permiso de circulación que deberemos cambiar a nuestro nombre lo antes posible, para no tener problemas en caso de un accidente, y un seguro de moto en vigor.Es recomendable mirar diferentes precios de seguros, y valorar la opción de aseguradoras especializadas en seguros de moto, como AMV, que nos ofrecen coberturas especialmente diseñadas para motoristas.

Pago

Por último, si llegamos a un acuerdo con el vendedor, habrá que formalizar un contrato de compraventa en el que demuestre que es el titular de la moto. Respecto al pago, lo normal es que la entrega de la moto y el pago sean simultáneos y que nos entreguen una factura por dicho concepto. Y si queremos ahorrarnos tiempo y papeleo, aunque nos cuente un poco más, deleguemos los trámites de cambio de titularidad de la moto en los profesionales de una gestoría.