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Seguridad vial

Guía completa de radares DGT en España: dónde están los controles provincia a provincia en agosto de 2025

Consulta el desglose de todos los radares de la DGT provincia a provincia actualizado a agosto de 2025

La DGT siembra las carreteras españolas con otros 32 nuevos radares PC

La DGT va actualizando periódicamente la ubicación de sus radares fijos y móviles en las carreteras españolas. Prueba de ello es que a principios de mes la Dirección sembró las carreteras españolas con 32 controles más. Esta es la lista completa de radares de la DGT provincia a provincia, a fecha de agosto de 2025.

Radares en Albacete

En la provincia de Albacete, la autovía A-31 cuenta con tres radares fijos, dos en sentido creciente (kms 50.6 y 127.0) y uno en decreciente (km 137.8). La carretera N-322 también tiene tres cinemómetros fijos en los kilómetros 315.9, 367.1 (sentido creciente) y 327.2 (sentido decreciente). Por su parte, la N-430 combina un radar fijo (km 484.5) con un radar de tramo de más de 16 kilómetros.

Los controles móviles son muy frecuentes en carreteras convencionales. Se recomienda especial precaución en la N-322, la N-301, la CM-412 y la N-430, donde operan en amplios tramos de su recorrido.

Radares en Alicante

Alicante destaca por la alta concentración de radares. La carretera N-332 es una de las vías más vigiladas, con 17 radares fijos repartidos en ambos sentidos. La autovía A-70 también concentra un número importante de controles, con seis cinemómetros fijos entre los kilómetros 6 y 27. La A-7 dispone de dos radares fijos en sentido creciente (kms 487.6 y 521.9).

Los tramos de vigilancia móvil son numerosos, afectando a carreteras como la CV-70, CV-81, la propia N-332 y la N-340.

Radares en Almería

En Almería, la vigilancia se reparte entre autovías y carreteras secundarias. La A-7 cuenta con tres radares fijos: uno en sentido creciente (km 760.2) y dos en decreciente (kms 778.0 y 824.5). La carretera A-370 dispone de un radar de tramo de poco más de un kilómetro en ambos sentidos, entre los puntos kilométricos 8.4 y 9.4.

Los radares móviles tienen una presencia muy activa en vías como la N-340a, la A-334 y múltiples carreteras de la red provincial como la AL-3108 y la AL-3115.

Radares en Asturias

El Principado de Asturias presenta una elevada densidad de controles. La A-8 es la vía con más vigilancia, acumulando diez radares fijos y un radar de tramo en el kilómetro 505 (sentido decreciente). Le sigue la A-66 con cuatro cinemómetros fijos.

Los radares de tramo son habituales en carreteras secundarias como la AS-117, AS-112 y AS-19. Por su parte, los controles móviles cubren extensos tramos de la N-634, N-632 y la AS-15.

Radares en Ávila

En Ávila, la N-403 es una de las carreteras más controladas, combinando un radar fijo (km 89.4) con cuatro radares de tramo entre los kilómetros 83 y 118. La autopista AP-6 cuenta con dos radares fijos en los kilómetros 106.9 (creciente) y 108.6 (decreciente).

La vigilancia móvil es frecuente en carreteras como la CL-501, la N-110 y la N-VI, especialmente en los tramos que atraviesan la provincia.

Radares en Badajoz

La provincia de Badajoz cuenta con vigilancia en sus principales autovías. La A-5 dispone de tres radares fijos (dos en sentido creciente y uno en decreciente), mientras que la A-66 tiene dos, uno por cada sentido. En la carretera N-432 se combinan tres radares fijos con un importante radar de tramo de casi 15 kilómetros de longitud.

Los controles de velocidad móviles se concentran en vías convencionales de alto tránsito, como la EX-105, EX-110 y la propia N-432.

Radares en Baleares

En las islas, la vigilancia es exhaustiva. En Mallorca, la Ma-13 cuenta con tres radares fijos y la Ma-19 con dos. En la Ma-13A y la Ma-15 operan radares de tramo. En Menorca, la carretera ME-1 está controlada por cuatro radares fijos. En Ibiza, varias carreteras como la E1-200, E1-30 o E1-700 disponen de cinemómetros.

La presencia de radares móviles es notable en casi todas las islas, destacando la vigilancia en la Ma-10 (Mallorca), Me-1 (Menorca) y la C-733 (Ibiza).

Radares en Burgos

La autovía A-1 a su paso por Burgos está vigilada por tres radares fijos. La carretera N-1 es la más controlada, con cuatro cinemómetros fijos, tres de ellos en sentido creciente. La CL-629 también dispone de cuatro radares fijos. Además, hay un radar de tramo en la N-120.

Los agentes de tráfico suelen situar controles móviles en tramos de la N-234, la N-120, la N-122 y la propia N-1.

Radares en Cáceres

En la provincia de Cáceres, la A-5 tiene dos radares fijos (kms 183.8 y 179.1) y la A-66 uno (km 508.0). Las carreteras convencionales combinan varios sistemas: la EX-109 tiene dos radares fijos y uno de tramo, mientras que la N-521 cuenta con dos cinemómetros fijos.

Las vías con mayor probabilidad de encontrar un radar móvil son la EX-118, EX-203, EX-205 y la N-630.

Radares en Cádiz

Cádiz es una de las provincias con más radares de tramo. Se encuentran en la CA-33, CA-35, A-7, A-48 y la N-340. En cuanto a radares fijos, la A-381 y la A-382 tienen dos cada una, mientras que la N-357 acumula hasta seis dispositivos.

La vigilancia móvil es especialmente intensa. Se recomienda precaución en la A-373, A-384 y en diferentes tramos de la N-340.

Radares en Cantabria

En Cantabria, la A-8 combina cuatro radares fijos con dos de tramo, uno por cada sentido, entre los kilómetros 140 y 146. La A-67 también está vigilada por cuatro radares fijos en la zona de Santander. La carretera N-629 cuenta con un radar de tramo entre los puntos kilométricos 81.1 y 83.3.

Los controles móviles son habituales en la N-611, N-621, N-623 y la N-634, así como en carreteras autonómicas como la CA-141 y la CA-142.

Radares en Castellón

La autopista AP-7 es la vía con más radares fijos de Castellón, con un total de cuatro. La N-340 es la más vigilada en conjunto, ya que suma cuatro radares fijos y cuatro de tramo, localizados entre los kilómetros 960 y 1035.

Carreteras como la N-232, la N-234, la propia N-340 y la CV-10 son puntos frecuentes de operación para los radares móviles.

Radares en Ciudad Real

La autovía A-4 a su paso por Ciudad Real tiene cuatro radares fijos. En la carretera N-401 hay dos cinemómetros fijos, y en la N-430 otros dos. También hay dispositivos fijos en la CM-403, CM-4111, CM-4124 y la CM-420.

La vigilancia móvil se extiende por numerosas vías, destacando por su frecuencia la CM-412, CM-4106, N-420 y la N-430.

Radares en Córdoba

La carretera N-432 es, con diferencia, la más vigilada de la provincia, con siete radares fijos. La autovía A-4 cuenta con tres cinemómetros fijos en la zona de la capital. También hay radares fijos en la A-339, A-386, A-431 y en la autovía A-45.

Los controles de velocidad móviles son habituales en tramos de la A-318, A-424, A-431 y la N-502.

Radares en A Coruña

En la provincia de A Coruña, la A-6 y la AC-11 cuentan con dos radares fijos cada una, al igual que la AC-12. La AG-11 dispone de cuatro cinemómetros fijos. En la AC-552 y la AG-55 operan radares de tramo.

Los agentes de tráfico instalan con frecuencia radares móviles en vías como la AC-550, AC-552, AC-862 y, especialmente, en la N-550 y N-634.

Radares en Cuenca

La autovía A-3 dispone de dos radares fijos en los kilómetros 78.3 (decreciente) y 156.5 (creciente). La N-301 tiene dos cinemómetros fijos (kms 190.6 y 191.1) y un radar de tramo de más de 6 kilómetros entre los puntos 70 y 77. La N-420 también está vigilada por dos radares fijos.

La presencia de radares móviles es significativa en carreteras como la N-320, N-400 y la propia N-420, que son objeto de controles habituales.

Radares en Granada

La autovía GR-30, que circunvala la capital, es un punto de alta vigilancia con tres radares fijos y un radar de tramo. También se encuentran cinemómetros fijos en la A-92N (km 9.2), la A-92 (kms 241.7 y 256.3), la A-395 (tres radares), la N-340 (tres radares) y la N-432 (dos radares).

Los controles móviles son habituales en carreteras como la A-308, la GR-3424, la N-323 y la N-432, por lo que se recomienda extremar la precaución en estas vías.

Radares en Guadalajara

La autovía A-2 es una de las vías más controladas con cuatro radares fijos. Sin embargo, la carretera N-320 destaca por su intensa vigilancia, combinando cuatro radares fijos y cuatro de tramo, estos últimos localizados entre los kilómetros 259 y 300. La CM-101 también dispone de dos radares fijos.

La vigilancia mediante dispositivos móviles es frecuente en tramos de la N-211, la propia N-320 y la carretera autonómica CM-101.

Radares en Huelva

En Huelva, la A-49 cuenta con dos radares fijos (kms 46.3 y 50.8). En la carretera N-433 opera un radar de tramo de más de 4,5 kilómetros. Además, hay cinemómetros fijos en vías como la A-483, A-492, A-494, A-497, H-30 y, de forma notable, en la N-435 con cuatro dispositivos.

Los controles móviles se concentran en carreteras como la A-483, la A-494 y la mencionada N-435, que complementan la vigilancia fija.

Radares en Huesca

La vigilancia en Huesca se centra en carreteras nacionales. La N-330 es la más controlada, con seis radares fijos, especialmente en el tramo final hacia la frontera. Le siguen la N-240 con cuatro dispositivos y la N-II con uno. Otras vías como la A-23, N-123, N-211 y N-230 también cuentan con radares fijos.

Los puntos de control móvil se suelen establecer en carreteras con alto volumen de tráfico, como la A-131, A-138, N-230, N-240 y la N-330.

Radares en Jaén

La autovía A-4 a su paso por Jaén dispone de un radar de tramo de más de 3 kilómetros (km 245) y dos radares fijos. La autovía A-44 tiene tres cinemómetros fijos, mientras que la A-316 cuenta con otros tres. La carretera N-432 está vigilada por dos dispositivos fijos.

La probabilidad de encontrar controles móviles es alta en vías como la A-301, N-322, A-401 y la propia N-432.

Radares en León

La autovía A-6 es una de las más vigiladas de la provincia, con seis radares fijos distribuidos a lo largo de su recorrido. La A-66 le sigue con tres. En la N-120 se combinan tres radares fijos con un radar de tramo de 2 kilómetros. La autopista AP-66 también cuenta con un control de tramo.

Las carreteras CL-621, CL-626, N-120, N-601, N-630 y la N-VI son las elegidas habitualmente para la instalación de controles de velocidad móviles.

Radares en Lugo

En Lugo, la vigilancia se concentra en las autovías. La A-6 cuenta con cuatro radares fijos. La A-8 es especialmente vigilada debido a la niebla, con dos cinemómetros fijos y tres radares de tramo, uno de ellos de más de 5 kilómetros de longitud (km 545).

La vigilancia móvil es frecuente en carreteras nacionales como la N-120, N-540, N-640 y, sobre todo, en largos tramos de la N-VI.

Radares en Madrid

La Comunidad de Madrid presenta una de las mayores densidades de radares del país. Las principales autovías radiales (A-1, A-2, A-3, A-4, A-5 y A-6) están equipadas con múltiples radares fijos en sus primeros kilómetros. Las autovías de circunvalación como la M-40, M-45 y M-50 también cuentan con controles permanentes. Además, hay que tener en cuenta los radares de tramo en la AP-6 (Túnel de Guadarrama), la M-521, M-600 y la N-320.

Los controles móviles son especialmente activos en vías de alta capacidad como la M-111, M-404, M-506 y M-607, entre otras.

Radares en Málaga

La provincia de Málaga destaca por el uso de radares de tramo. Se localizan en la A-45 (dos tramos), A-397 (dos tramos), A-7, A-377 y MA-20. En cuanto a radares fijos, la A-45 suma otros dos, la A-7 tiene tres, y hay dispositivos en la A-355, A-367 y A-397, entre otras.

Las carreteras con mayor probabilidad de albergar un control móvil son la A-356, A-366, A-384 y la mencionada A-397.

Radares en Murcia

La Región de Murcia tiene un control exhaustivo de sus autovías. La A-30 está vigilada por cinco radares fijos. La A-7 combina un radar fijo con dos de tramo, situados entre los kilómetros 634 y 635. También hay cinemómetros fijos en la RM-11 (dos), RM-12, RM-15, RM-19 y RM-602.

Las carreteras N-332, N-344, RM-332 y RM-714 son las vías donde es más frecuente encontrar radares móviles.

Radares en Navarra

En la Comunidad Foral de Navarra, la carretera N-121a es una de las más controladas, con tres radares fijos (kms 25.9, 32.5 y 60.2). La autovía A-15 tiene un radar fijo en el km 127.6, la A-1 tiene otro en el km 401.5, y la AP-68 uno más en el km 218.2.

Los controles de velocidad móviles son una constante en las principales vías navarras, como la N-113, la N-121, la NA-132 y la N-135.

Radares en Ourense

La autovía A-52 es la columna vertebral de la vigilancia en Ourense, con un total de seis radares fijos a lo largo de su trazado. La N-120 cuenta con dos cinemómetros fijos. Por su parte, la N-525 combina dos radares fijos con un radar de tramo de más de 3,6 kilómetros.

Los tramos más habituales para los radares móviles se sitúan en la N-120, N-525, N-541 y la carretera autonómica OU-536.

Radares en Palencia

En Palencia, la vigilancia se ha reforzado con radares de tramo de gran longitud. La CL-615 cuenta con cuatro de estos sistemas, uno de ellos de casi 33 kilómetros. La CL-613 también dispone de cuatro radares de tramo. En cuanto a fijos, hay en la A-62 (tres), A-67 y A-231.

Las carreteras nacionales N-610 y N-611, así como la autonómica CL-615, son puntos frecuentes para los controles móviles.

Radares en Las Palmas

En Gran Canaria, la GC-1 cuenta con cuatro radares fijos y la GC-3 con dos. En Lanzarote, hay cinemómetros fijos en la LZ-2 (dos), LZ-30 (tres) y LZ-56 (tres), además de radares de tramo en la LZ-67 y LZ-701. En Fuerteventura, la FV-2 tiene dos radares fijos.

La vigilancia móvil es especialmente activa en la FV-2 (Fuerteventura), GC-200 y GC-500 (Gran Canaria), y la LZ-1 (Lanzarote).

Radares en Pontevedra

La autovía A-55 es una de las más vigiladas de Galicia, con cinco radares fijos en la provincia de Pontevedra. La autopista AP-9 combina un radar fijo con dos de tramo. La N-550 también está muy controlada, con cuatro radares fijos y uno de tramo.

Los controles móviles son muy habituales en carreteras de alta densidad de tráfico como la N-541, N-550, N-640 y la autonómica PO-308.

Radares en La Rioja

La autopista AP-68 es la vía con más radares fijos de La Rioja, con un total de cuatro. Le sigue la carretera N-232 con tres dispositivos fijos. También hay cinemómetros en la A-12, A-13, LO-20 y la N-111.

Las carreteras LR-113, LR-250, N-111 y, de forma muy insistente, la N-232, son los escenarios más comunes para los radares móviles.

Radares en Salamanca

La vigilancia en Salamanca combina sistemas fijos y de tramo. Hay radares fijos en la N-630 (dos) y N-501. Por otro lado, operan radares de tramo en la CL-517 (de casi 12 kilómetros) y en la SA-20.

Los agentes de tráfico suelen realizar controles de velocidad móviles en vías como la CL-510, la N-620 y la N-630.

Radares en Santa Cruz de Tenerife

En Tenerife, la autopista TF-5 combina dos radares fijos con dos de tramo. La TF-1 y la TF-13 cuentan con dos cinemómetros fijos cada una. La TF-655 también dispone de un radar de tramo. En La Palma, la LP-3 está vigilada por un radar fijo.

Los controles móviles son frecuentes en la TF-13, TF-21, TF-24 y la TF-28 en Tenerife, y en las carreteras LP-1 y LP-2 en La Palma.

Radares en Segovia

La autovía A-1 y la carretera N-VI cuentan con dos radares fijos cada una en la provincia de Segovia. La autopista AP-6 combina un radar fijo con uno de tramo, mientras que la N-110 está vigilada por otros dos dispositivos fijos.

Las carreteras autonómicas CL-601 y CL-603, junto con la N-110, son las vías con mayor probabilidad de albergar controles de velocidad móviles.

Radares en Sevilla

Sevilla es una de las provincias con mayor número de radares. La autovía A-92 tiene siete radares fijos, y la circunvalación SE-30 otros siete. La A-4 cuenta con tres cinemómetros fijos y un radar de tramo. La N-IV también dispone de un radar de tramo de más de 4 kilómetros.

La vigilancia móvil es una constante, especialmente en tramos de la A-360, A-364, la propia N-IV y la carretera N-433.

Radares en Soria

En Soria, la N-122 es la carretera con más vigilancia, sumando tres radares fijos. La autovía A-2 tiene dos, y la N-234 combina un radar fijo con uno de tramo de casi 3 kilómetros.

Los controles de velocidad móviles son frecuentes en las carreteras CL-101, CL-116, N-111, N-122 y N-234.

Radares en Teruel

La provincia de Teruel tiene sus radares fijos muy repartidos. Cuentan con dos dispositivos la A-23, la N-234 y la N-420. También hay cinemómetros en la N-211 (uno) y la N-232 (tres).

Las carreteras nacionales N-211, N-232, N-234, N-330 y N-420 son las vías donde es más probable encontrar un control de velocidad móvil.

Radares en Toledo

Toledo es una de las provincias con más controles. La A-42 tiene cuatro radares fijos, al igual que la A-4. La N-301 combina dos radares fijos con uno de tramo de más de 6 km. También hay radares de tramo en la A-5, N-401a y N-403.

La vigilancia móvil es muy intensa, sobre todo en la CM-401, N-401, N-403 y la N-502.

Radares en Valencia

En la provincia de Valencia, la A-7 es la vía con más radares fijos, un total de ocho. Le sigue la N-332 con cuatro. La A-3 cuenta con tres cinemómetros fijos y un radar de tramo. También hay sistemas de tramo en la CV-35, CV-500, CV-60, V-23, V-30 y V-31.

Los agentes de tráfico suelen operar con radares móviles en carreteras como la N-322, N-330 y las autonómicas CV-50 y CV-60.

Radares en Valladolid

La autovía A-62 a su paso por Valladolid está vigilada por tres radares fijos. La N-601 combina dos radares fijos con un radar de tramo de casi 2 kilómetros. La N-122 también cuenta con dos dispositivos fijos.

Las carreteras nacionales N-122 y N-601, junto a las autonómicas CL-602 y CL-610, son los puntos preferidos para la instalación de controles móviles.

Radares en Zamora

La autovía A-52 es la más vigilada de Zamora con cuatro radares fijos, seguida de la A-6 con tres. La carretera N-122 dispone de un radar de tramo de más de 5 kilómetros de longitud entre los puntos 474 y 479.

La vigilancia mediante dispositivos móviles se centra en la N-122, N-525 y N-631, entre otras.

Radares en Zaragoza

Zaragoza tiene un gran número de radares en sus autovías. Tanto la A-2 como la A-68 cuentan con seis cinemómetros fijos cada una. La N-330 y la N-II tienen tres radares fijos respectivamente. La circunvalación Z-40 y la carretera N-125 disponen de radares de tramo.

Los controles de velocidad móviles son muy frecuentes en la N-122, N-232, N-330 y la carretera desdoblada N-II.