El sector del motor aporta al Estado casi 40.000 millones de euros

La recaudación fiscal de la automoción alcanzó el pasado año la cifra de 39.514 millones de euros, (+0,2%) de los que 5.630 millones procedieron de la adquisición de vehículos nuevos (+22,7%) y aportó un saldo comercial positivo de 18.842 millones de euros para la economía española gracias a sus exportaciones a más de 90 países. Pese a estas cifras, el actual Gobierno no atiende las peticiones del sector para poder seguir manteniendo este flujo económico. Por ello, el presidente de la patronal Anfac, Wayne Griffiths, dimitió hace dos semanas ante los constantes incumplimientos del equipo de Sánchez y el pasado martes se reunió con el jefe de la oposición, Alberto Núñez Feijóo.

Desde la dimisión de Griffiths, el puesto de presidente de la asociación está vacante. Una situación que se resolverá el próximo viernes 19, día en que está convocada la asamblea para la elección de un nuevo mandatario del sector. Entre los nombres que se barajan parece que el que más posibilidades tiene es el actual presidente de Renault, José María Recasens. Pero aún hay plazo para la presentación de alguna otra candidatura. Aunque en Anfac están integradas todas las empresas del sector, es decir, tanto las que tienen plantas de producción en España como los importadores, hasta ahora han ocupado la presidencia dirigentes de empresas con factoría en nuestro país. Pero podría romperse esta tradición.

Lo cierto es que este es uno de los sectores clave para la economía nacional. Según el último informe de actividad correspondiente al pasado ejercicio, los fabricantes y empresas de automóviles que operan en España alcanzaron una facturación de 78.154 millones de euros. El hecho de que las plantas de producción lograron una estabilidad en la recepción de componentes y aprovisionamiento de materiales permitió un ritmo positivo de las fábricas, que alcanzaron la cifra de 2,45 millones de vehículos fabricados en nuestro país durante el pasado año. En cuanto al resultado neto, se obtuvo una cifra de 1.039 millones de euros y por lo que respecta a los puestos de trabajo directos, las marcas de automoción mantienen 58.414 empleos en sus centros de producción y oficinas operativas.

A pesar de que España no tiene ninguna gran empresa propia, lo que significa que tampoco posee un centro de decisión, sino que estamos a expensas de que nuestro futuro del sector se decida en otros países, como EE UU, Alemania o Francia, nuestro país se ha mantenido como el segundo mayor productor europeo y el octavo a nivel mundial. El 90% de los vehículos fabricados aquí se exportan a más de 90 países en todo el mundo, con lo que supone de beneficio para la balanza de pagos. Por otra parte, durante 2023, las empresas de automoción invirtieron un total de 2.395 millones de euros, un 14,7% más que en el año anterior, Por todo ello, el sector de la automoción tiene un gran valor económico, industrial y de empleo para la economía nacional.

Pese a todas estas cifras, la realidad es que la situación en general se encuentra todavía en niveles inferiores a los anteriores a la pandemia. En 2023, el mercado nacional cerró con 949.359 ventas de turismos, lo que supone un aumento del 16,7%, pero aún un 24% por debajo del 2019. De igual manera la producción, que aumentó un 10,4% en 2023, con 2,45 millones de vehículos fabricados, fue un 14,6% inferior a las cifras registradas en el ejercicio 2019.

Todos los fabricantes e importadores de automóviles hablan con especial preocupación acerca de la situación del mercado de automóviles eléctricos y electrificados. Un concepto que incluye tanto a los vehículos eléctricos puros como a los híbridos. Durante el año pasado, el mercado electrificado aumentó un 49%, con un total de 124.607 vehículos. En esta cantidad se incluyen turismos, comerciales, pesados y autobuses de eléctricos puros e híbridos enchufables. De esta cifra, 113.776 fueron turismos electrificados. Una cantidad que situó al mercado nacional en torno al 12% de la cuota de mercado, pero lejos del hito que se marcó en 2023 para los objetivos de reducción de emisiones.