Pactos regionales

La fórmula murciana con la que Vox tiene su sombra en el Gobierno regional

La consejera de Educación, Mabel Campuzano, forma parte de los diputados de Vox que fueron expulsados del partido, y que la Justicia ahora obliga a readmitir

La consejera de Educación y Cultura, Mabel Campuzano, una de las personas de Vox, en el juramento de su cargo ante el presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras, durante el acto de toma de posesión en el Palacio de San Esteban
La consejera de Educación y Cultura, Mabel Campuzano, una de las personas de Vox, en el juramento de su cargo ante el presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras, durante el acto de toma de posesión en el Palacio de San EstebanJuan Carlos CavalAgencia EFE

El resultado de las elecciones autonómicas de Castilla y León que han otorgado la victoria al dirigente del PP, Alfonso Fernández Mañueco, han abierto nuevamente una etapa de diálogo, consenso, negociación y pactos que ponen sobre la mesa la complicada distribución del tablero político contemporáneo, cuyo entendimiento se hace más que necesario, obligatorio. Si bien es cierto que desde las filas populares señalan que la victoria y la intención del partido es formar gobierno en solitario, la exigencia de Vox de formar parte del Ejecutivo regional pone entre las cuerdas al PP, que ve en el partido de Santiago Abascal a unos socios más probables que otros. Especialmente tras la caída de Ciudadanos.

El propio presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras, recordaba este lunes que es posible gobernar con el PP en una comunidad autónoma, poniendo de ejemplo su propio Ejecutivo, cuyo partido es el único que tiene una representación dentro del Gobierno, y defendía un gobierno de Mañueco. “Lo más factible y lo más probable es que haya un gobierno solo del Partido Popular, como aquí, ya que que el PSOE, y sus socios de gobierno, no tienen posibilidad de gobernar porque han perdido 20 diputados”.

No obstante, cabe recordar que el gobierno del PP se basa en los apoyos con los que contó tras la moción de censura que presentó Ciudadanos y PSOE hace ahora un año, y que fracasó, dejando al Ejecutivo murciano con miembros de distintas formaciones. Y una de ellas es Vox. Más concretamente, expulsados de Vox. La consejera de Educación, Mabel Campuzano, es la principal representación de la formación de Abascal en un gobierno autonómico, si bien es cierto que tanto ella como otros dos compañeros, Juan José Liarte y Francisco Carrera, fueron expulsados del partido.

Una expulsión que, no obstante, el Juzgado de Primera Instancia número 4 de Cartagena anuló y dictó sentencia que obligaba a readmitir en el partido a los tres miembros, que fueron expulsados después de que despidieran a trabajadores contratados en Madrid y bloquearan el acceso a las cuentas del Grupo parlamentario regional a miembros de la Dirección Nacional, entre ellos, Javier Ortega Smith y al propio Santiago Abascal. “Las ratas y los traidores jamás serán de Vox”, dijo tajante el presidente provincial de Vox en Murcia, José Ángel Antelo, tras conocer la resolución judicial.

Pese a todo este embrollo político, las ideas de Vox tienen actualmente presencia en un Gobierno autonómico, en el Ejecutivo murciano. Una de ellas, quizá la más polémica, es la aplicación del pin parental, es decir, la autorización de los padres y madres de los alumnos para asistir a determinadas actividades extracurriculares.

Actualmente, el Gobierno murciano está compuesto por los dirigentes del PP, más tres diputados de Ciudadanos (que votaron en contra de su partido en la moción de censura, y por lo cual fueron expulsados), y una diputada expulsada de Vox. Así, actualmente está, además del presidente López Miras, cinco consejeros del PP, tres Departamentos dirigidos por los miembros expulsados de Ciudadanos, y una consejería perteneciente a la expulsada de Vox.