Los regantes protestan en Alicante en defensa del Tajo-Segura: “Por caprichos políticos, 40.000 personas irán al paro”

Protesta multitudinaria en Alicante en defensa del trasvase Tajo-Segura. Regantes, agricultores, ganaderos, profesionales agrarios y representantes políticos se han concentrado este martes en una movilización masiva en contra del Plan Hidrológico del Tajo aprobado el pasado 3 de mayo por el Ejecutivo central que prevé un aumento de los caudales ecológicos del Tajo y, por lo tanto, reducirá en más de 100 hectómetros cúbicos el agua trasvasada al Segura, que riega campos de la Región de Murcia, Alicante y Almería. Por este motivo, más de un millar de personas se han concentrado en la Plaza de la Montañeta, en Alicante, con una veintena de tractores y ocho toneladas de naranjas para condenar la actuación del Gobierno central que, a su juicio, responde más “a criterios políticos que técnicos. No podemos asumir que por caprichos políticos del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, en estas regiones se vayan más de 40.000 personas al paro”.

Así de contundente lo ha expresado el presidente del Sindicato Central de Regantes (Scrats), Lucas JIménez, quien ha insistido en que el nuevo Plan del Tajo “no va a beneficiar en nada la cuenca, ni siquiera a los municipios ribereños”, sino que únicamente satisface los “intereses políticos de su gobernante, que no para de lanzar mensajes que rozan la estulticia de mal gusto”.

Jiménez ha puesto en valor la amplia representación de los sectores afectados congregados desde Alicante, la Región de Murcia y Almería, “estamos unidos para reclamar justicia y criterios técnicos a la hora de planificar este país”. Además, también ha asegurado que no se puede permitir que por “exigencias políticas”, se vaya a producir un “deterioro de nuestro medio ambiente, con la desaparición del verde en una de las regiones más áridas de Europa”.

Unos datos que el propio Jiménez ha atribuido al Ministerio para la Transición Ecológica, y ha acusado al Ejecutivo central de “estar dispuesto a asumir estas consecuencias para satisfacer los intereses políticos” de García-Page. “No hay por qué elevar los caudales en el Alto Tajo, hay que invertir en una buena depuración”, ha planteado.

El presidente de Scrats ha insistido en que la movilización de los trabajadores agrícolas se lleva a cabo para reclamar “justicia y que se apliquen los mismos criterios que se han hecho en el resto del país. Somos pocos, pero también tenemos nuestros derechos”.

“Inadmisible”

Por su parte, el presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras, también ha asistido a la protesta en la que ha dicho “echar de menos” a cierta representación socialista en la defensa de la infraestructura. “Nos jugamos mucho, y no estamos todos los que deberíamos, porque algunos solo aparecen cuando en España gobierna el PP”. Así, no obstante, ha vuelto a “tener la mano para poder luchar por el futuro de nuestra Región, de Almería y de Alicante, porque es inadmisible que el Gobierno de España se esté planteando cerrar el trasvase”.

De esta forma, ha recordado que fue en Albacete en el año 2018 cuando Pedro Sánchez anunció su intención de cerrar los trasvases. “No entiendo cómo de todos los trasvases, solo se cuestiona la viabilidad y se quiere cerrar uno”. Una infraestructura que, además, según ha detallado, dejará en la calle a 15.000 familias murcianas que viven de él, y aporta el 70 por ciento de las frutas y hortalizas que exporta España gracias al riego.

“Hacemos un llamamiento a que el Gobierno de España anule ya la revisión de los caudales ecológicos y el Plan de cuenca del Tajo que aprobó absolutamente con criterios políticos, y que ponga en marcha los criterios técnicos necesarios que avalan que el trasvase es viable. Que dejen a un lado el sectarismo y las políticas partidistas, porque estamos hablando del futuro del Levante, de miles de familias, y del futuro de nuestro país. No hay lugar para la política, sino para el interés general”, ha zanjado.

A la protesta también ha acudido el presidente de la Diputación de Alicante y del PPCV, Carlos Mazón, quien ha pedido que se convoque una mesa porque “esta guerra al agua a la que está sometiendo el PSOE no tiene ningún futuro, ni con mentiras, ni demagogias ni cálculos electorales”. Mazón ha abogado por el diálogo “desde la solidaridad de todas la regiones españolas, porque el agua es de todos”.

El presidente del PPCV ha destacado que “en España hay agua para todos y no hay que depender de que llueva para que todos podamos regar nuestros campos. La solidaridad es para todos y va siempre en una doble dirección”. Mazón ha recordado que “nosotros defendemos lo que en justicia, medioambientalmente, solidariamente y territorialmente nos corresponde pero no queremos nada que no nos corresponda” y ha reivindicado “las inversiones necesarias en Castilla- La mancha que se deberían de hacer y que el Gobierno de Sánchez no ha hecho. Son hermanos regantes nuestros”.

También ha contado con la presencia de las conselleras del Gobierno valenciano de Ximo Puig Josefina Bueno (PSPV-PSOE) y Mireia Mollà (Compromís), y las portavoces en Les Corts Valencianes socialista, Ana Barceló; de Cs, Ruth Merino; y de Vox, Ana Vega.

También han asistido otros políticos de la Región murciana y de la Comunitat Valenciana, entre ellos muchos alcaldes como los de Alicante, Luis Barcala (PP); Elche, Carlos González, (PSPV-PSOE) y Orihuela, Carolina Gracia (también del PSPV-PSOE).