Sin licencia de apertura desde 2022

Teatre pasó una inspección en 2023 sin tener licencia

El Ayuntamiento de Murcia insiste en que nada tienen que ver los procedimientos de orden de cese con los de regularización de la actividad

MURCIA, 03/10/2023.- Agentes de la Policía Judicial acceden a la discoteca Fonda Milagros mientras realizan labores de investigación en las discotecas Teatre y Fonda Milagros de Murcia este martes, tras el incendio declarado la madrugada del pasado domingo y que costó la vida de trece personas. EFE/Juan Carlos Caval
Drones policía realizan planimetría locales incendiados y agentes toman muestras localesJuan Carlos CavalAgencia EFE

La discoteca Teatre de Murcia, una de las afectadas junto a la Fonda Milagros por el incendio del pasado domingo en el que perdieron la vida 13 personas, superó el pasado mes de marzo una inspección sanitaria pese a tener vigente una orden municipal de cese de actividad. Así lo puso ayer de manifiesto la portavoz de la sala, María Dolores Abellán, quien aseguró que es «público y conocido» que el local contaba con la preceptiva licencia de funcionamiento, negando así la información proporcionada desde el Consistorio municipal que anunció que Teatre tenía una orden de cese de actividad desde el pasado enero de 2022. No obstante, desde el propio Ayuntamiento confirmaron a este periódico que ambas actuaciones son «independientes», y no son incompatibles.

Rebeca Pérez, vicealcaldesa del Gobierno municipal, aseguró que después de que se presentara una propuesta de división de los locales, para lo que se requería una modificación sustancial de la licencia, se denegó dicha actuación, por lo que decayó en ese momento la vigente actividad de Teatre. «Pero ellos seguían teniendo derecho a iniciar un proceso de regularización de su situación».

Por ese motivo, y parte de ese proceso, es el informe preceptivo de la inspección sanitaria que se ha publicado, «porque forma parte de ese proceso de regularización de la situación la visita de una inspección del servicio municipal de veterinaria, porque se trata de una discoteca con cocina».

Pérez, además, también abrió la posibilidad a que hubiera otros procedimientos en curso, ya que dentro del proceso de regularización de actividad, es común que esto ocurra. «Lo desconozco, pero lo que sí sé es que nada tiene que ver una cosa con la otra y son expedientes absolutamente distintos. Lo normal es que cuando uno tiene un problema administrativo, intente regularizar su situación».

Al hilo de lo que subrayó la vicealcaldesa del Consistorio murciano se sumó el PSOE de Murcia, partido que gobernaba el Ayuntamiento en marzo de 2023. Fuentes de los socialistas señalaron en un comunicado que la inspección se hizo a instancias del servicio de Disciplina de Actividades (Urbanismo) y ratificó que «es uno más de los preceptivos para que los establecimientos consigan la licencia de apertura, por lo que se hace cuando el establecimiento no está con actividad».

Por ello, consideraron que no supone el reconocimiento de que la empresa tenga esa actividad, «sino que tiene intención de tenerla, y superarlo no implica la concesión de la licencia, puesto que hay otros informes requeridos, como el de extinción de incendios o el de instalaciones, entre otros». Por último, la formación socialista indicó que todo este proceso es el «normal» cuando existe una nueva solicitud y corresponde a la tramitación que desarrollan los propios funcionarios del servicio.

Por otra parte, cabe destacar que el juzgado de Instrucción número 3 de Murcia asumió ayer las diligencias abiertas por 13 delitos de homicidio imprudente en el incendio en la zona de ocio nocturno de Atalayas el pasado domingo. La titular de este órgano será la que dirija la investigación para el esclarecimiento de los hechos y depuración, en su caso, de eventuales responsabilidades penales.

Actualmente, se está a la espera de que se completen las labores de identificación, una vez concluida la autopsia por los médicos forenses del Instituto de Medicina Legal de la Región, con el fin de informar al juzgado sobre las causas y circunstancias de las muertes.

Según confirmaron a LA RAZÓN fuentes cercanas a la investigación, por el momento son seis las personas identificadas mediante la toma de muestras genéticas y huellas dactilares. Según los expertos, hay que hablar de que los cadáveres han resultado «carbonizados».

Una vez terminada la fase de obtención de muestras, ahora la Policía Científica está a la espera de recibir los resultados de posibles coincidencias genéticas.

Además, el grupo de Homicidios se encontraba también tomando declaración a los testigos en la Comisaría del Barrio del Carmen, para poder aportar toda la información posible sobre el origen del incendio.

El caso podría ir por lo penal

El Fiscal Superior de Justicia de la Región, José Luis Díaz Manzanera, afirmó que las penas para quienes la justicia considere responsables del incendio pueden alcanzar los 9 años de prisión si el caso se desarrolla por la vía penal. «Aumentando las penas en grado, en función de la extrema gravedad y añadiendo otro aspecto, que es que afecte a un número importante de personas, se puede llegar incluso hasta los 9 años de prisión», indicó en declaraciones a Onda Regional de Murcia.

El juzgado mantiene el secreto de sumario decretado de las diligencias abiertas y está a la espera de recibir la autopsia preliminar una vez que estén plenamente identificados los 13 fallecidos, para hacer su entrega a las familias y librar las licencias de enterramiento.

El Instituto de Medicina Legal contó con la colaboración del Servicio de Anatomía Patológica del Hospital Reina Sofía, que cedió parte de sus equipos e instalaciones, lo que agilizó mucho los trabajos, como explicaba su director, Juan Pedro Hernández del Rincón, agradeciendo su ayuda al equipo.

Los cadáveres estaban en uno de los aseos

El jefe de bomberos de Murcia, Juan Ángel Navidad, ofreció ayer nuevos detalles sobre la actuación de los bomberos durante los trabajos de desescombro de los últimos días. Al parecer, se hallaron cuatro de los cadáveres encerrados en uno de los aseos de la primera planta de Fonda Milagros, probablemente intentando evitar el fuego. Otros siete se encontraron divididos en dos grupos durante el pasillo hacia la salida, y finalmente, se encontraron otros dos entre los escombros que había bajo el mismo aseo, es decir, que probablemente una de las paredes del baño cediera y cayera sobre las víctimas. «El resto de la estructura no se derrumbó».

Esta actuación ha supuesto la mayor intervención que han realizado los bomberos del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS) del Ayuntamiento de Murcia desde que se tiene constancia.

En el lugar trabajaron sin descanso y durante más de 30 horas un total de 100 efectivos y 22 vehículos; unas horas que, aseguraron, han sido «de intenso trabajo, nervios, tensión y mucha preocupación».