Opinión

El chiringuito de Pedrerol: Del robo del siglo al penalti claro

No sé si es bueno que desde el club se conteste a los medios de comunicación. Reconozco que tengo mis dudas al respecto. Pero el hartazgo que se respira entre la afición del Madrid no se puede esconder. Salta a la vista. Están cansados de ser siempre el muñeco del pim pam pum, de que se cuestionen sus éxitos, de que se le ponga freno a sus alegrías. Y el célebre y tan recurrente señorío del Madrid empieza a desesperar a los propios madridistas. Llevan tiempo esperando y hasta exigiendo una respuesta del club a lo que consideran ataques permanentes desde el exterior.

Mou lo intentó. Mourinho se quedó completamente solo defendiendo al Madrid y se acabó quemando al final. El entrenador portugués echó de menos que los jugadores le siguieran en sus protestas y reivindicaciones. Algunos miembros de la plantilla incluso llegaron a criticar en sus círculos esa actitud de Mou. Desde el club sólo se salió a defenderle en situaciones extremas. Y en esa línea se ha movido el Madrid. Sin contestar. Ni siquiera lo hizo con Piqué cuando insinuó que se movían «hilos» en el palco del Bernabéu.
Pep y otros culés. Otro que aprovecha la menor oportunidad para salir a la palestra hablando del Madrid es Guardiola. Cuando tiene que reconocer un fracaso en Europa, se acuerda de los blancos. Siempre funciona y da réditos sacar al Madrid para desviar la atención, algo que también cansa y mucho a la afición merengue. Y lo del penalti a Lucas Vázquez ha sido la gota que ha colmado el vaso de su paciencia. Hasta los culés reconocen que el empujón de Benatia fue penalti. Así lo hicieron ilustres azulgranas como son Stoichkov, Abidal, Lineker o Sonny Anderson. Vaya palo a los periódicos catalanes que denunciaron al día siguiente «el robo del siglo» o hablaban de un «máster en arbitraje». Tampoco se acordaron del gol mal anulado a Isco.

Algo ha cambiado. Florentino nunca ha querido responder a provocaciones ni acusaciones, pero a veces ese silencio no ha sido entendido por los aficionados, que se han sentido menospreciados desde el exterior sin haber encontrado la reacción contundente desde dentro del club que deseaban. Sin embargo, últimamente da la impresión de que esto está cambiando. Parece que los jugadores han dicho «hasta aquí hemos llegado». No quieren permanecer callados ante lo que consideran un trato injusto. También Zidane ha sido más claro que nunca en rueda de prensa. Y en redes sociales se ha producido una movilización para exclamar «basta ya».

Toca mover ficha. Florentino impuso una línea de la que nunca ha querido desviarse, pero esta semana se han producido ciertos movimientos indicando que esta política de comunicación puede estar replanteándose. Ahora bien, si el Madrid quiere endurecer su línea, no parece que Butragueño sea precisamente el mejor candidato para desempeñar el papel de portavoz. Florentino es quien tiene que mover ficha. Estaremos atentos.