Opinión

Política desastre

Si no era suficiente con la llegada al poder de lo que el PSOE tiene de izquierda, la necesidad de apoyarse para gobernar en los partidos de filiación comunista va a deteriorarnos de inmediato. Una política sustentada en la subida de impuestos como instrumento para aumentar el gasto es de por sí un desastre: inutilidad productiva, frenazo al crecimiento y aumento del desempleo.

La aceptación por parte de Pedro Sánchez de la exigencia de Podemos de incrementar el techo de gasto dinamita la dinámica progresiva en materia económica que había encauzado el Gobierno del PP. La iniciativa de que sea la banca y las grandes fortunas las que se hagan cargo de esa escalada impositiva no pasa de ser una excusa demagógica. Sabemos que los paganos serán los componentes de la clase media, quienes estamos controlados, presos diría yo, por una nómina. Quizá aquéllas se libren de la quema porque su hostigamiento provocaría efectos más perjudiciales para España. Sin olvidar que cualquier carga para las financieras las costearemos nosotros los usuarios.

La experiencia demuestra, aquí y en el resto del mundo, que esa política de la izquierda radical hace más pobres a todos. Sólo enriquece a quienes ejercen el poder. A ellos se les quitan las penas y, sobre todo, el pudor. Ejemplo de ello ya hemos podido comprobarlo en los últimos tiempos incluso aquí.

Al final, la solidaridad con los de abajo, la igualdad de clases, la ayuda social etc. basada en la subida de impuestos es la jerigonza de los gobernantes para llevar a todos a la ruina.

Por tanto, señores políticos, como decimos los mexicanos ¡no mamen! Así es la vida.