Opinión

El Chiringuito de Pedrerol: Tras el Mundial, nada será lo mismo

Necesitan alejarse Que se vayan. Que se aireen en Abu Dabi. Que se alejen de un Bernabéu desesperado por culpa de un juego ramplón, previsible y con muy poco gol. Este equipo, con jugadores jóvenes que parecen exfutbolistas y con otros que no dan la talla después de más de cinco años en el club, necesita cambiar el chip urgentemente. El Mundial de Clubes, el que puede ser el tercero seguido de los blancos y el cuarto en cinco años, es el escenario perfecto para tomar aire y volver a España con otra cara.

¿Dónde están los campeones?

Hay algo en lo que tienen razón los jugadores del Madrid. No se puede faltar al respeto a un equipo que ha sido campeón de Europa tres años consecutivos. Pero la gran pregunta es: ¿Dónde ha quedado ese grupo de futbolistas que hizo historia hace sólo siete meses? ¿Por qué casi todos los jugadores parecen peores? ¿Por qué da la impresión de que han perdido la ilusión por vestir esa camiseta? Y lo más importante de todo: ¿Son recuperables? ¿Pueden revertir la situación?

Pésima imagen

El Madrid ha ganado los dos últimos partidos dando muy mala imagen, por la mínima, pidiendo la hora... y contra los dos últimos clasificados en la tabla. Solari es plenamente consciente de que el fútbol de su equipo aburre. De que no enlazan dos jugadas seguidas. De que les cuesta generar ocasiones de gol y aún más, marcarlos. De que su Madrid no tiene continuidad, no manda en los partidos y no transmite seguridad. Pero su único objetivo era amarrar los seis puntos para viajar al Mundial de Clubes con cierta tranquilidad. Eso al menos lo han logrado.

Ganar daría alas

El Madrid siempre está obligado a ganar todos los títulos que disputa, pero esta vez es más importante si cabe regresar con el Mundial en el bolsillo. Eso daría alas a un grupo que parece haber perdido la autoestima y al que no le están saliendo las cosas en el terreno de juego. Para ello tendrá que aparecer la versión más solidaria del Madrid, donde todos se dejen el alma en cada balón al servicio del equipo. Con intensidad, actitud y trabajo, sin importar el rival que tengan delante.

Hace falta una alegría ya

Pero cuidado: una derrota sería muy difícil de digerir para una afición y un vestuario muy necesitados. El madridismo quiere una alegría ya en una temporada con demasiados sobresaltos. Y los jugadores necesitan volver a sonreír y recobrar la confianza antes de intentar recuperar el juego que les puso hace muy poco en lo más alto. En el Mundial de Clubes empieza todo. Empieza o acaba.