Opinión

El Chiringuito de Pedrerol: Que no se constipe Messi

Que le den lo que quieran. Que renueve por enésima vez. Que le dejen una silla en el palco del Camp Nou al lado de Bartomeu para cuando quiera descansar. O que directamente le den la presidencia. Messi es el Barça.

Lo ganó él solo

Él solo le ganó el sábado al Sevilla. A un buen Sevilla además, como decía Joaquín Caparrós. «Messi es un futbolista distinto, ha estado espectacular y ha sido imposible pararle».

El «hat trick» casi perfecto Se acabaron las bromas. Ha vuelto el mejor Messi, el que es capaz de levantar partidos imposibles. En el Sánchez Pizjuán hizo el «hat trick» casi perfecto. Sólo le faltó lograr un tanto de cabeza. Porque marcó un golazo con la izquierda a media altura con una volea espectacular. Hizo el segundo aprovechando una gran combinación con Dembélé, con un remate a la escuadra esta vez con su pierna derecha.Y cerró su cuenta particular y su exhibición a cinco minutos del final, cuando aprovechó un mal despeje del portero sevillista para culminar su gran obra con una «picadita» de vaselina.

Un genio

Fue un ejercicio goleador sólo al alcance de los genios. De un genio como él. Qué maravilla. Qué talento. Qué jugador. Y por si no hubiese sido suficiente, también le regaló al final un gol a su amigo Luis Suárez porque sabe que necesita algo de confianza. Qué grande eres Leo y qué gozada tenerte entre nosotros, disfrutarte en nuestra Liga.

Lo quiere todo

Ahora llegan los momentos decisivos. Messi quiere la Champions este año. «Queremos ganar esa Copa tan bonita...», dijo a comienzos de temporada ante los aficionados, consciente de que los tres últimos años se ha fallado en cuartos. Pero da la sensación de que también quiere la Liga y la Copa. Tiene ganas de pasar a otra final copera. Y está especialmente motivado de cara al partido del miércoles. Quiere dar el golpe en el Bernabéu. Lo de Sevilla fue como un calentamiento...

Ojo al Madrid

Pero Messi y este Barça que gira a su alrededor van a tener enfrente a un Madrid también motivado, con el ADN competitivo tan suyo, tan especial y que ya le plantó cara en la ida del Camp Nou. Y que, de momento, llega con ese empate a un gol que le sigue haciendo favorito.

Rey de Europa blanco

Messi tiene ganas. Pero Sergio Ramos también. Y el capitán madridista sabe que ganarle este miércoles al Barça supone no sólo llegar a la final de Copa en Sevilla, sino un plus especial para afrontar también la Champions, esa competición grabada a sangre y fuego en el madridismo. Un equipo que lleva siendo el Rey de Europa 1.003 días seguidos... ¡Qué partido!