Opinión

La falacia monclovita

No sé si será él –me refiero al presidente en funciones- si Iván Redondo, si José Luis Ábalos o los tres juntos quienes diseñan la táctica para unas nuevas elecciones, que es su verdadero Proyecto, sabedores de los beneficios que ello le reportaría. Eso sí, que se obtenga la imagen de que la culpabilidad recaiga sobre otros.

Lo han alcanzado respecto a Podemos -¡por su culpa no hay Gobierno! claman los mariachis monclovitas y repican sus acólitos- y a medias respecto a Ciudadanos. El sumo de la jugada aparece con la última campaña de acoso al PP de Pablo Casado para que facilite la investidura con la abstención de sus diputados mediante la falacia “como hizo el PSOE con Mariano Rajoy”, asumida y pregonada a los cuatro vientos desde las filas socialistas y una mayoría mediática.

Digo falacia porque no es cierto que Rajoy, cuando en diciembre de 2015 obtuvo 123 diputados, encontrara apoyos desde la bancada liderada entonces por Pedro Sánchez. Al contrario fue él quien se presentó a la sesión de investidura avalado por un pacto con Albert Rivera, destinado al fracaso y origen de una segunda convocatoria electoral. Fue tras los comicios de junio de 2016 cuando Rajoy, ya con 146 escaños, mantuvo la Presidencia con la abstención de un buen puñado de diputados socialistas. Y no fue por Sánchez, que con su eterno e inalterable “no es no” prefirió dimitir antes que apoyar la maniobra.

Ni el PSOE facilitó la investidura a Rajoy cuando tenia 123 diputados, los mismos que ahora tiene Sánchez, ni jamás éste se adhirió a la operación. No fue por él, fue forzada por los clásicos del PSOE. Así es la vida.