¿Perjudicados? Los españoles

Pedro Sánchez va a consumar su traición a España y Pablo Casado su error por lo que se refiere a la negociación para la investidura y la formación de una mayoría parlamentaria sin riesgo, a no ser que los hados intervenieran en forma de convocatoria electoral por parte de Quim Torra y ERC se viera muy perjudicada cuando todo parece sonreírle.

Para lograr mantenerse en la Moncloa, se dispone a dinamitar sus principios pregonados hasta ahora: «No podría dormir con Podemos en el Gobierno», «no quiero ser presidente con el apoyo de los independentistas». Ahora conocemos por qué lanzaba tales afirmaciones: sabía que, expresando lo contrario, la sangría de votos era evidente. Una vez mantenido al PSOE como partido más votado, decidió acogerse a una de las sentencias del genial Groucho Marx: «Si no le gustan estos principios, tengo otros».

Por su parte, Casado no ha aprovechado la ocasión para dejar a Sánchez como único y exclusivo responsable de no llegar al «pacto de los constitucionalistas» aferrándose al «no es no» y rechazando ofrecer la negociación de algunos problemas de Estado. Da la impresión de que con ello ha tomado el camino de Albert Rivera. Tiene razón Casado al afirmar que Sánchez ya tiene todo pactado, pero su postura le ha dado el argumento al candidato socialista para decir que le obligan a pactar con quienes quieren dinamitar España. ¿Perjudicados? Los españoles. Así es la vida.