Contagio

«Por una película con un tiburón de plástico en una piscina, la gente se quedó en casa y dejó de ir al mar. Imagínese lo que harían por algo real». Es una de las primeras conversaciones entre expertos, autoridades y responsables públicos que aparecen en la película «Contagio», estrenada en 2011. Escenas, frases y conceptos plagiados de la ficción a la realidad, o viceversa; es el huevo y la gallina, la misma frecuencia existencial: informes imprecisos, contactos con la OMS, colegios cerrados, confinamiento, informaciones contradictorias, protocolos de tratamiento, síntomas, periodos de incubación, sistema inmunitario, paciente cero, blogueros hablando de armas biológicas… «Una vacuna podría tardar meses en probarse en humanos». «Cada día una persona se toca la cara de tres a cinco veces por minuto». «A veces la gente está contagiada sin mostrar ningún síntoma». «En 1918, la gripe española se llevó al 1% de la población mundial». «Cualquier cifra que les dé no será real». «El virus no puede sobrevivir varios días en una caja». «Lavarse las manos, guardar la distancia, rociar todo con gel higienizante». «No podemos hacernos cargo de los cuerpos». «Solo queremos llorar la pérdida». «Internet dice que la OMS está confabulada con las farmacéuticas». «La verdad está siendo ocultada al mundo»… Vi la película hace años y me pareció ciencia ficción. Volví a verla hace días y se antoja puro realismo. Si tienen oportunidad, véanla. No da aprensión; ya estamos inmunizados porque estamos inmersos en el argumento y en muchas de sus escenas . No les cuento el final, solo rescato una frase más: «Es una gran historia, y aparte, es verdad. Cuántas veces se puede decir eso».