Siempre en nuestra memoria

Hoy se cumplen 18 años del atentado terrorista más brutal de la historia de España.

Para recordar lo que ocurrió aquel triste día y conocer cómo siguen afrontando sus vidas las víctimas del 11M, Iñaki Arteta dirigió el documental «Nada será igual».

Más recientemente, supervivientes y expertos comparten sus opiniones y reflexiones en «11M», el documental de Netflix que sigue por tercera semana consecutiva en el Top 10 de lo más visto en España. Esta excepcional acogida contribuye decisivamente a la memoria y a la verdad, desde el relato en primera persona de sus protagonistas y la crisis política que desató este atentado, hasta la búsqueda de sus responsables.

Queremos seguir teniendo presente a las víctimas y compartiendo su dolor, saber qué ha sido de aquellos que lo vivieron en primera persona y mantener su recuerdo.

Dieciocho años después de aquella catástrofe humanitaria, las víctimas tienen aún mucho que decir a sus conciudadanos, necesitan que se las tenga en cuenta, quieren saber que no se les olvida y que se sigue compartiendo su dolor para hacerlo así más llevadero.

«Nada será igual» se hizo expresamente para homenajear a las víctimas de aquel atentado. Su director acaba de publicar por cierto «Historia de un vasco», libro en el que recoge cartas contra el olvido.

Y es que recordar un dolor que nos remueve hasta lo más profundo significa dejar de condenar a las víctimas al olvido. Significa decirnos que no estamos solas.

En la Estación de Atocha, un monumento levantado en memoria de todas las personas que fueron víctimas de aquellos despiadados explosivos mantiene vivo el recuerdo.

Cierto que erradicar la violencia que germina en tantas partes del mundo desde un entramado social desarraigado y/o infectado de victimismo y rencor es una ardua labor, pero lo que debe seguir impulsando un espíritu pacifista global es que hay mucha más gente que quiere la paz que quienes optan por utilizar la violencia.