José Antonio Vera

El reseteo de Feijóo

Sánchez ya sabe que Feijóo va a ser presidente del Gobierno. Tardará más, tardará menos, pero va a resetear España. Sólo hay que oír su discurso, ver su estrategia y la manera de afrontar la política que tiene el gallego. Ni más ni menos que como hizo en su comunidad cuando desde la oposición marcó de manera implacable a Touriño, aunque siempre con la mano tendida al acuerdo.

Algunos dicen que el todavía presidente de la Xunta es un blando. Lo que es en realidad es capaz. Duro cuando necesario, pero con un temple en las formas que le ha permitido renovar cuatro mayorías absolutas en una Comunidad sólo en apariencia de derechas, pues los socialistas gobiernan los principales ayuntamientos. Cierto que en las elecciones autonómicas esos mismos electores apostaban por él.

La explicación de ese voto mayoritario tiene dos claves. La primera, la gestión. Su capacidad de cuadrar las cuentas hasta con recursos escasos. En segundo lugar la cercanía a la gente, algo que he podido comprobar en diferentes escenarios, y que sólo políticos como Bono o Pujol supieron hacer con maestría. Ese don para dialogar, incluso con la izquierda o los sindicatos, le va a ayudar sobremanera en un momento en el que España reclama el fin del extremismo.

No lo va a tener fácil, pues será complicado que los votantes convencidos de Abascal le apoyen. Y son muchos. Las circunstancias calamitosas del país, empero, jugarán en favor del voto útil, de modo que es lógico que el nuevo presidente del PP consiga imponerse en las urnas como lista más votada.

El único «pero» está en su gestión de la pandemia. Isabel Díaz Ayuso demostró que no era necesaria tanta rigidez. Por ahí se le pueden ir muchos antiguos votantes del PP, gente en desacuerdo que por eso están con Vox. Y en las actuales circunstancias ningún voto es despreciable.