Política

África

Has venido al mundo la semana en la que este Gobierno, ante un caso de espionaje, ha colocado a los servicios de inteligencia de este país al borde del abismo

Hicieron bien los tuyos en ponerte el nombre del continente más desconocido y prometedor. Eres África, presente y futuro, un pequeño milagro. Un rayo de luz en la madurez juvenil de tu madre. Eres el rostro de la belleza para esta tita que te escribe en la distancia mientras observa, fascinada, tus fotos primeras. Esto que tengo que contarte te lo guardo para cuando cumplas los dieciséis, por si entonces quieres hacerte una ligera idea de cómo estaban las cosas por aquí cuando apareciste. Como escribió Shakespeare, «el pasado es un prólogo»: si no quieres que se repita, tendrás que conocerlo.

Este 6 de mayo aún estamos recuperándonos de una pandemia global, devastadora, en un mundo cambiante, en una Europa convulsa por culpa de un tirano con ansias expansionistas que, de momento, ha invadido un país y amenaza al resto con sus armas nucleares.

Has nacido en un lugar con infinidad de atractivos, objetivamente amable y afortunado –si nos comparamos con los vecinos– y, sin embargo, sumido en la incertidumbre económica. Somos potencia turística y, a la vez, líderes del paro juvenil europeo. La cesta de la compra de tus pañales está por las nubes; los carburantes, ni te cuento. Tu madre te podrá explicar la odisea de ser autónoma. Nuestros jóvenes –tus hermanos, sin ir más lejos– deben ser políglotas porque, muy probablemente, les tocará salir de España para buscarse la vida…, a no ser que se dediquen a lo turístico o a lo geriátrico.

La bandera de España, en todas las calles, solo la he visto a lo largo y ancho de la península cuando la selección española de fútbol ganó el mundial de Suráfrica. Como país, está comprobado que solo nos unen en masa las gestas de nuestros deportistas. Todo lo demás genera crispaciones. Nos gobierna una coalición sostenida con partidos independentistas y los miércoles, en el Congreso, asistimos atónitos a broncas estériles entre sus señorías. Fíjate, has venido al mundo la semana en la que este Gobierno, ante un caso de espionaje, ha colocado a los servicios de inteligencia de este país al borde del abismo. En la calle, los políticos no son valorados. Sí, en cambio, nuestras Fuerzas Armadas.

Cuanto más avanza un país, más soledad acumula en sus hogares. En estos momentos, corremos todos el peligro de caer en algún tipo de trastorno mental. En España, el suicidio es la primera causa de muerte no natural, pero aún nos da apuro hablar de ello. Hay quienes prefieren su mascota a las personas y hay países, como Estados Unidos, ya con más mascotas que niños. La tecnología nos salva de muchas enfermedades pero, a la vez, nos tiene abducidos. Espero que algún día te rías de estas barbaridades, que semejante caos te suene al Pleistoceno. Bienvenida, pequeña.